Cabe destacar que el director del Servicio Penitenciario de Mendoza, Eduardo Orellana, luego de dialogar con las reclusasl, indicó que “las causas de la protesta siguen siendo que se resuelva su situación judicial”, al tiempo que resaltó que “lo que han planteado en muchos de los casos es comprensible”.
El funcionario manifestó que “algunos procesos están referidos con sus beneficios de salidas transitorias y otros con la posibilidad de cumplir sus condenas de forma domiciliaria por tener hijos pequeños, en el caso de los delitos de menor gravedad”.
Por su parte, Jenifer una de las presas, en comunicación telefónica ayer por la tarde con radio Nihuil comentó que unas 100 reclusas adhirieron a la huelga de hambre, que cuatro chicas estaban arriba del techo de la institución, a la vez que afirmó que “vamos a estar tranquilas siempre y cuando no las repriman”.
Fuente (diariojornada.com.ar)