La crónica comienza el día sábado cuando la madre de la niña decide realizar ante la comisaria del menor, la mujer y asuntos juveniles una exposición por fuga del hogar de Micaela.
Es allí cuando comienza a funcionar la estigmatización y criminalización de los niños en contexto de calle, y especialmente a los que se fugan de sus hogares, y se dispara un protocolo POLICIAL de búsqueda consistente en dar con el paradero para DETENER – cual delincuente – a los niños fugados, en este caso fue igual, la policía comenzó la búsqueda y dio con el paradero de la niña, no devolviéndola a su hogar, sino ordenando la magistrada interviniente que sea DETENIDA EN LA COMISARIA, esto es PRESA y aplicándose el tratamiento de un REO.
En horas de la madrugada, y con el fin de proveerles de cigarrillo y otras golosinas, personal policial masculino, habría abusado sexualmente de la niña, siempre en dependencia policial.
Luego de ello y al comentarse esta situación es que la magistrada – Dra. IRMA DOMÍNGUEZ – conocida en nuestra ciudad por el trato inhumano, cruel que le propina a los niños cuando quedan bajo su competencia, decide que la misma sea alojada en el hogar (orfanato) RINCON DE LUZ ubicado en calles Resoagli y Cartagena de esta ciudad.
A ese lugar llega el lunes por la tarde, comparte la tarde noche con otras niñas y niños del lugar, cocinan, comen, lavan los platos y por disposición de la magistrada es alojada en una habitación cerrada con llave para que pase la noche, en total soledad.
Lo cierto es que al abrirse la puerta, por parte del celador, el día miércoles a las 8:30 horas, habría encontrado a MICAELA pendiendo de una sábana, digo habría porque la escena del crimen fue alterada ya que cuando llegaron los peritos la niña no se encontraba en la posición que menciono la persona que la encontró.
Luego de mantenerla en la morgue por más de 24 horas, el día jueves se procedió a realizar la autopsia médico legal y que arrojo como resultado de la muerte asfixia por comprensión, colocando que la causa seria un supuesto suicidio, siendo que llamativamente no consta la hora aproximada de su muerte.
Datos que sostienen y aumentan las dudas sobre el hecho es que surge de la autopsia que la niña se habría ahorcado arrodillada, que la sabana que supuestamente uso no se encuentra a disposición de la instrucción y no se remitió con su cuerpo a la morgue, que se altero la escena del crimen, que la resistencia del barrote de la ventana del cual supuestamente, estuvo pendiente el cuerpo no tiene una consistencia tal de poder tolerar el peso de un cuerpo y la altura no es suficiente para quedar colgando.
La niña no tenía ningún signo o síntoma que hiciera presumir dicha intensión, y fue entrevistada por un psicólogo previo a encerrarla en la habitación donde fue encontrada y que no haya nada raro en su personalidad, que de haber algún signo debió advertir el profesional.
Luego de ser requerido por la familia y por quien suscribe se le aplico el protocolo de víctimas de delitos contra la integridad sexual, y los resultados están pendientes, siendo que existen versiones que la niña, previo al crimen, habría sido abusada sexualmente por personal masculino en dependencia de la comisaria del menor la mujer y asuntos judiciales de esta capital.
Durante toda su estadía como detenida en la comisaria del menor, la mujer y asuntos juveniles y las horas transcurridas en el orfanato NUNCA VIO A LA NIÑA NINGUN ASESOR DE MENORES.
Corrientes es una de las provincias más pobre del país y el control social del sistema penal se ejerce hacia los más humildes y necesitados, con el afán de no visibilizar la existencia de hogares expulsivos por vulnerabilidad social y económica ocultan los casos de fuga y no se realizan las búsquedas por gabinetes especiales que contengan a los niños fugados de sus hogares y resuelvan el problema del hogar expulsivo, a cambio se les da tratamiento de delincuentes, es por ello que digo, esta ausencia de políticas públicas del gobierno provincial hacia la niñez y adolescencia violando las normas nacionales e internacionales protectorias de los derechos de los niños es lo que hace que la muerte de MICAELA ROMERO de tan solo 13 años sea una crónica de UNA MUERTE ANUNCIADA.-
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