Lola Aniyar de Castro visitó la Unidad 48

 
La Dra. Lola Aniyar de Castro, vino desde Venezuela, visitó la Universidad Nacional de San Martín, donde recibió el título de Doctora Honoris Causa. Luego participó del Seminario Internacional organizado por el Programa de Criminología de la Universidad que dirige el Juez y Ministro, Eugenio Raúl Zaffaroni. El cierre estuvo a cargo del Rector de la UNSAM, Carlos Rafael Ruta.
Lolita fue invitada, por d Dr. Gonzalo Nogueira, asesor de Zaffaroni, y autoridad de la UNSAM a conocer, a sus alumnos del Taller de “Criminología de los Derechos Humanos”, que él dicta semanalmente, en el Centro de Estudiantes Universitarios “Azucena Villaflor” de la Sede CUSAM sita en la Unidad 48.
El jueves 9 de agosto del corriente año, Lolita llegó al conclave organizado por Nogueira donde todos sus alumnos esperábamos en el Centro nombrado en primer término, ansiosos, para conocer a Lolita, una destacada criminóloga que nos propone una “Criminología de los Derechos Humanos”.
En virtud de ello, se dio apertura al debate, con un problema político, que sin duda es el delito. Por sobre todas las cosas, analizamos las políticas de “Tolerancia cero”, y su técnica “Racial Progiling”, que traducida al castellano significa “Delito de Portación de Cara”, que fue comprada y repartida para toda Latinoamérica durante las políticas neoliberales en los 90, como una Dictadura para los pobres, la criminalización de la pobreza, que en nuestro país aun sigue vigente.
Lolita propuso, que nos preguntemos ¿cómo eligen a los Jueces?, e hizo mención a una democratización de la Justicia. Todos los allí presentes, coincidirnos en que las cárceles sólo generan violencia y que con ese fin fueron creadas. Todo es parte del poder punitivo y la represión hacia los sectores más pobres, más vulnerables e indefensos, los que se drogan, los que comenten delitos, las cárceles se hicieron para los pobres.
También nos explicó: “La organización de los grupos sociales es fundamental para poder resistir y reclamar los derechos. El terror es una herramienta que los Poderes utilizan para manipular el dolor y el miedo de las personas. Se aprovechan porque las muchedumbres (masas populares) son inconscientes e irracionales entonces los medios televisivos las manipulan y les venden sexo, crimen y todo tipo de noticia que pueden ser vendidas como sensacionalistas. Los pobres son peligrosos porque no tienen los bienes y servicios que tienen las personas de las clases más altas de la sociedad, es por eso que existe la criminalización de la pobreza. En la sociedad, la solidaridad entre las diferentes clases es central, y eso no existe en nuestra sociedad”, Lolita nos mira y sonríe, los alumnos nos sentimos muy bien con ella
Consideramos pertinente evocar aquí, que Lolita fundó el Grupo Latinoamericano de Criminología Crítica. Además es Juri Menber of the Stokholm International Criminology, el mayor reconocimiento internacional en su disciplina. Docente e investigadora de la Universidad de Zulia- Venezuela; y durante 15 años Directora del Instituto de Criminología de esa institución. Su obra es conferencia continental y mundial: publicó entre otros libros: Criminología de la reacción social, 1976; Conocimiento y Orden Social, 1981; Criminología de la liberación, 1987; y Criminología de los Derechos Humanos, 2010.
Cabe destacar, que Lolita tiene una trayectoria política importante en su país como Diputada Nacional, Senadora Nacional, y luego fue Gobernadora del Estado de Zulia 1993 – 1995, en los tres casos fue la primera mujer en acceder a esos cargos, y fue delegada de Venezuela ante la UNESCO, también cónsul en Nueva Orleáns. Los alumnos pudimos percibir que Lolita es una persona hermosa, y estamos muy contentos de haberla conocido, aun escuchamos su voz; con ese lindo acento que nos dice; “La criminología tiene que ser, una criiminología militante de los Derechos Humanos, hay que resistir y perseverar, para que eso suceda y se pueda ver en la práctica. Porque todo el mundo comete delitos, pero sólo se condena el delito de los más pobres”, concluyó Lolita mientras nos despedíamos, y el Dr. Nogueira hacia de fotógrafo.
Jesús Cabral