Chicas secuestradas por las redes de esclavitud sexual, presos sociopolíticos y Madres de Plaza de Mayo

(APL) Cuando estuve en Neuquén presentando el libro «Intensidades de mujer»–en 2010 -, en el que escribieron 18 chicas de la cárcel de Ezeiza, lo escuché por primera vez: “Los presos de hoy son los desaparecidos de los años ‘70”. Así lo expresaron Lolín Rigoni e Inés Ragni, Madres de Plaza de Mayo de Neuquén y Alto Valle, durante la extensa entrevista que realizamos. En milésimas de segundo hice mía la idea. Margarita Meira, es una luchadora cuya hija Graciela, de 17 años, fue secuestrada por las redes de trata, sometida a la esclavitud sexual en famosos «boliches» porteños –en uno de ellos fue fotografiado el presidente Macri – y luego asesinada. Recientemente, Margarita apuntó con certeza: “Nosotras somos las nuevas Madres de Plaza de Mayo”. También adopté su concepto de inmediato. Lástima grande que la realidad que desentrañan con profundidad mujeres humildes del pueblo, no se transforme en acciónes de la casta política sin valores ni más competencia que forjar dinero con nuestro dolor.