Estrangulamiento no es paro cardiorespiratorio

 
Después de casi 72 horas de ocurrido el hallazgo sin vida del interno Dante Alejandro Vázquez a orillas del Paraná lejos de su celda en la Granja Yatay, donde funciona la Unidad Penitenciaria Nº 4 de Corrientes, el propio jefe del Servicio Penitenciario Provincial Miguel Ángel Domínguez, confirmó que el preso fue asesinado por estrangulamiento y no murió a causa de un paro cardiorrespiratorio como fuentes oficiales intentaron hacer creer. Pese a ello, tampoco desde los organismos oficiales emitieron un comunicado para aclarar esta cuestión. “El primer examen médico del occiso en el lugar del hecho no reveló que haya sufrido una muerte traumática, no se observó ninguna lesión visible”, dijo-increíblemente-,  el propio Domínguez. Esa tarde, Vázquez, otro interno y dos guardiacárceles trabajaban en la fabricación de las bases de un destacamento fijo que estaban por instalar próximamente. Casi al final de la jornada, se ofreció para ir a buscar hacia el río a los caballos que el SPP posee en la Granja Yatay, lo que fue autorizado. “Al rato aparecieron los caballos solos y el interno no llegó, por lo que su compañero fue a buscarlo y lo encontró tirado en la costa del río. Su cara estaba dentro del agua y ya estaba sin vida”. Otro crimen del Servicio Penitenciario correntino que, fiel a si mismo y a sus camaradas del resto del país, que ya suma varios muertos por “paro cardiorrespiratorios” en lo que va del año.                                                                                                                Fuente: Red Provincial de Derechos Humanos