Scanner cancerígeno
Al comenzar el diálogo, Tagliapietra – quien se acaba de recibir de abogado- sostuvo que: “Los familiares son pasados por el scanner y luego se le practica además la revisación con contacto corporal y desnudo, lo que resulta una incongruencia y una arbitrariedad absoluta, ya que los dispositivos se implementaron, según la administración penitenciaria para no realizar las requisas con contacto corporal y desnudez. También se instalaron con la excusa de agilizar el ingreso de los mismos y por el contrario, los familiares pasan alrededor de 3 horas hasta lograr ingresar a la visita. Se dan muchísimos casos en que se los hace pasar repetidamente por la máquina, demostrando una clara ineficacia o falta de capacitación e idoneidad para interpretar las imágenes extraídas de la misma, han confundido una simple menstruación con drogas introducidas en la vagina, por ejemplo. Cabe aclarar que esto se le practica de manera indiscriminada a niños menores de edad, mujeres embarazadas, personas con discapacidades, etc. varias de las cuales a pesar del miedo a las represalias han realizado denuncias penales que no fueron atendidas y mucho menos prosperado”.

Lugo, el militante que elaboró el habeas corpus presentado ante el Juzgado Federal de Instrucción Federal Nº 2 de Lomas de Zamora, destacó que “este dispositivo utiliza rayos x, los cuales son nocivos tanto para los tejidos celulares, como para el material genético (sobre todo en los embriones) y su utilización por fuera de la medicina se haya prohibido por la legislación en la mayoría de los países desarrollados, justamente éstos se encuentran atravesados por la problemática específica del “terrorismo” y han determinado que sólo se puede utilizar esta tecnología cuando está en riesgo la vida y/o la salud de la población por un eventual ataque, es decir, en los aeropuertos de estos países se utilizan scanners de iones o perros en primer lugar y en caso de detectar restos de explosivos y/o material estupefaciente se recurre a la utilización de los rayos x por única vez. Aquí las visitas son expuestas a los rayos de forma periódica entre tres y seis veces por semana lo que aumenta la posibilidad de daño ya que el efecto de los rayos es acumulativo. No existe una dosis de rayos x por baja que sea que no produzca daño”.

Sobre el impacto de los rayos x sobre el tejido celular, Tagliapietra remarcó que “causa la destrucción de las membranas, las mitocondrias y el tejido celular en general. Por otro lado el material genético es afectado, ya que, produce simples y dobles roturas de la cadena de ADN en forma directa e indirecta por la producción de radicales libres. Dependerá del estado de salud de cada individuo (edad, sexo, estado general de salud) y la capacidad de las células de reparar el daño celular y genético del daño efectivo que sufra el mismo. En este sentido resulta muy peligroso para los embriones durante las primeras semanas de gestación, ya que, están constituidos por pocas células y el daño de una sola de ellas puede derivar en un nacimiento defectuoso por falta de desarrollo de algún órgano o función”.

Incumplimiento de órdenes judiciales
“Otro de los problemas – indicó el abogado- que se están dando de manera sistemática son diversos incumplimientos a órdenes judiciales concretas en relación a salidas por acercamiento familiar, velorios, nacimientos, enfermedades, etc. Cabe aclarar que el tribunal a cargo de un detenido al que se le negó el derecho asistir al velorio de su padre, había evaluado según los informes correspondientes, y ordenó al SPF que lo traslade para asistir al velorio”.

Limitaciones arbitrarias para el acceso al estudio
Respecto de las limitaciones que impone el SPF a los detenidos para el acceso al estudio en general y al Centro Universitario en particular, Luis subrayó que: “Cíclicamente se imponen trabas con distintos argumentos (excusas), requisas, falta de combustible del móvil dentro de la cárcel, pinchaduras repetidas de las gomas del mismo, etc. En otros casos, recurren directamente a la coacción, si van al aula, les descuentan las horas del pobre peculio que cobran, como si el detenido pudiera elegir a qué hora estudia y a qué hora trabajar, lo mismo si salen a visita; en la Unidad Nº 4 de mujeres de Ezeiza, están en pie de lucha por estos mismos motivos”.
Finalmente, Tagliapietra sostuvo que desde en los últimos meses, “se viene registrando una virulencia represiva que ya existía con el anterior gobierno. Son habituales las represiones a palazos y balas de goma en los pabellones. En el Centro Universitario destruyeron muebles, libros y material de estudio de las computadoras. Todas estas acciones represivas son parte de la devastación que sufren los privados de libertad en nuestro país, castigo que se extiende a sus familiares”.