(Por Gabriela Conder/ abogada de La Gremial) Si bien ahora lxs compañerxs se encuentran en libertad, es importante recorrer los hechos. En el marco de la marcha por los 3 años de la desaparición forzada de Santiago Maldonado y a 3 meses de la de Facundo Astudillo Castro compañerxs y amigxs, este sábado, salieron a la calle a recordar al «Lechu», «Brujo», -un pibe anarquista que estaba cortando la ruta en las reivindicación de territorios mapuches- que desapareció el Estado. Ahí estaban como todos los primeros de agosto , también reclamando por otro detenido desaparecido de este gobierno. Vimos desde las redes como personas de civil, otros con chalecos y algunos uniformados salieron de caza en el momento que estaban desconcentrando, con la violencia que estamos acostumbrados se llevaron a 13 detenidxs, lxs verduguearon, lxs golpearon. Desde la Gremial de Abogadxs estábamos atentxs porque el año pasado pasó lo mismo, pero en época de pandemia y viendo desde la tele que no estaban reprimiendo, pensamos que no iba a pasar nada.. pero no, estaban preparados para reprimir con toda su violencia. (Fotos: Represión de la Policía de la Ciudad/ Gabriela Conder/ Santiago/Facundo).
Les persiguieron y les apresaron, los acusaron de resistencia a la autoridad y daños, en la alcaldía les abrieron las mochilas y sólo tenían ropa. Quería comunicarme con la fiscalía de turno pero nunca y nadie atendió el teléfono.
Llegué a la alcaldía y hablé con la persona a cargo y ya habían llamado al médico.
Los revisa el médico, constatan domicilios y ven antecedentes y luego los largaron a eso de las 2 de la madrugas. La semana que viene les tomarán las indagatorias.
Al igual que el año pasado la represión en la marcha no respeta protocolos ni pandemia.
Éramos muy pocos lxs que estábamos en la puerta de la alcaldía, los familiares de los detenidxs fueron llegando de a poco. Solucionamos algunos temas puntuales donde se pudo compartir la solidaridad de muchxs compañerxs y el saludo telefónico de otrxs tantos. Gracias por la solidaridad inmediata. A no bajar la guardia.