Desde la Multisectorial Contra la Violencia Institucional, junto con las familias de David Campos y Emanuel Medina, celebramos esta sentencia inédita en la ciudad de Rosario. Entendemos que es fruto de la lucha colectiva de familiares, abogades y organizaciones sociales, políticas, culturales, sindicales y de derechos humanos por la construcción de MEMORIA, VERDAD y JUSTICIA. Hoy, la justicia reconoció lo que siempre sostuvimos, reconociendo, aquel viernes 23 de junio de 2017 no hubo enfrentamiento, a David y Emanuel los acribilló la policía cuando se encontraban inmovilizados, desarmados e indefensos. Contacto de prensa: Querella: Santiago Bereciartua 0341-156845214. – Federico Garat 341- 156954622/ Familiares: Eduardo Campos 0341-153421710 – Germán Campos 0341-156804739

Existió, además, una densa trama de complicidades para intentar garantizar la impunidad; tal como suele suceder en los casos de violencia institucional, en los cuales les policías, actuando de manera corporativa, se investigan a sí mismes, alteran la escena de los hechos e instalan versiones falsas de lo sucedido. Bustos y Mendoza, quienes perpetraron los disparos mortales e intentaron implantarles armas a los jóvenes muertos, fueron condenados a prisión perpetua, por el delito de homicidio calificado. El agente Escalante fue condenado a siete años de prisión por el delito de abuso de armas calificado y encubrimiento doblemente agravado. El resto de les policías tuvieron condenas de cinco, tres y un año por el delito de encubrimiento calificado.

Hoy el Estado contribuyó a reparar algo del daño producido a las familias y a la comunidad toda. Sentó un precedente importante y necesario en el camino de garantizar la no repetición de estas graves violaciones a los derechos humanos, reeditando, en el actual contexto democrático, la vigencia del NUNCA MÁS.

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