(APL) «Nosotras tuvimos que abandonar nuestra patria, mataron a nuestro querido Néstor hace ya 13 años, torturaron, violaron y ejecutaron a Lilian y María con tanta saña un escuadrón de monstruos enfermos. Ellas solo niñas con hermosa sonrisa soñadora, si soñadora por que vivían soñando con conocer a sus padres. Han hecho desaparecer a nuestra niña Lichita una niña gentil, agradable y cariñosa una excelente estudiante, solidaria. Hemos tenido que dejar nuestra casa de misiones en donde pasamos tan lindos momentos junto a nuestros niños». Fragmento de la Carta de la Familia Villalba -todas mujeres aguerridas- donde agradecen a lxs luchadores que apoyan la «Campaña Internacional #eranniñas-Aparición con vida de Lichita» y dan cuenta de la persecución de la que son blanco por parte del Estado terrorista paraguayo, que ellas enfrentan con toda entereza.
Agradecemos al pueblo rebelde que no permanece indiferente a esta situación, que a pesar de saber que no sacará nada en lo personal, que renuncian a sus momentos libres de recreación, de compartir un momento más con sus familias, que pueden correr la misma suerte que mi familia, sin embargo, están ahí poniendo el cuerpo de lleno, exigiendo justicia por Lilian y María y por la aparición con vida de Lichita. Nosotros tenemos la suerte de contar con todo su apoyo, porque existen miles de personas que sufren a diario y no encuentra una mano, un compañero que les pueda decir que hay que seguir adelante.
El significado de esta manifestación militante no es sólo de solidaridad, sino de continuidad de la lucha de nuestra América. Agradecemos y abrazamos a cada uno de ustedes, porque hoy nosotras que quedamos tenemos la obligación de tomar la bandera de Lilian Mariana, María Carmen y Lichita, Carmen Elizabeth. Para nosotros, como dice Lichita, la quietud, la indiferencia no es una opción.
Nosotras tuvimos que abandonar nuestra patria, mataron a nuestro querido Néstor hace ya 13 años, torturaron, violaron y ejecutaron a Lilian y María con tanta saña un escuadrón de monstruos enfermos. Ellas solo niñas con hermosa sonrisa soñadora, si soñadora por que vivían soñando con conocer a sus padres. Han hecho desaparecer a nuestra niña Lichita una niña gentil, agradable y cariñosa una excelente estudiante, solidaria. Hemos tenido que dejar nuestra casa de misiones en donde pasamos tan lindos momentos junto a nuestros niños.
Y ahora como resultado de todo esto un miembro de nuestra familia, una madre, una hermana, una hija esta presa en un cuartel (siendo que es la única mujer que ha sido encarcelada allí, durante toda la historia del Paraguay)
Pero hoy todo esto nos dice, quienes quedamos tenemos la obligación de redoblar nuestros esfuerzos, esclarecer nuestras ideas de comunistas, abrazar nuestra lucha y seguir adelante. Por Néstor, por Lilian y María, por Lichita.
Familia Villalba