(Por Bárbara Taboada/APL) Ante el contexto del Censo Argentino 2022 digital, de carácter obligatorio y bimodal, el cual busca incluír y visibilizar la presencia afro e indigena de la población actual; Mauricio Nillian, Director de la Universidad Popular Originaria, hace un llamado a la reflexión: ¿Por qué obligarnos a responder las demandas del opresor?
Desde hace años las comunidades pre existentes exigen respeto y legitimidad de derechos. El Estado siempre supo de la existencia nativa, porque para construirse tuvo como objetivo excluír, arrasar y desarticularla.
Esa es la verdad histórica. La política de estado buscó arrancar la raíz nativa, “desmalezar” el territorio e implantar la ficción patriótica.
Hoy día la politica global asume la integración sin fronteras, la unicidad pluricultural, el colorismo vacío; porque de ese modo las decisiones las toman las corporaciones y los jefes de Estado obedecen a modo de bloque.
Este censo responde a diversos intereses foráneos, lo preocupante es que organizaciones indigenas estan incentivando a la marcación la “identificación y mención”, ya que que ven en ésto, la posibilidad de visibilizar la presencia originaria negada.
Lo peligroso es no tener en cuenta las futuras consecuencias de la valoración de cruce de datos, en un mundo extractivista tecnócrata y ecocida, en camino a la IV revolución digital-tecnológica y transhumanista.
(*)Dis-Censo Mapuche 2022
Para quienes hemos sobrevivido en esta guerra de autodefensa nacional Mapuche, y habiendo finalizado la primera ocupación militar del Wallmapu a finales del siglo XIX, por primera vez, en 500 años, vivimos bajo coacción de un régimen militar y racista externo.
La invasión winka no se extiende a más de 140 años.
En un cálculo histórico para nuestra nación, ese número representa un grano de arena en la playa, no así para los Estados winkas chileno/argentino, pues para su ficción de colonia extractivista, este tiempo -140 años- es casi la totalidad de su nacimiento, vida y existencia.
Es a partir del genocidio iniciado en 1880 que se incorporan las tierras saqueadas al mapa vigente, casi definitivo, de estas jurisdicciones llamadas Chile/Argentina tal como hoy se conocen
Debemos dejar bien en claro, que la conceptualización engañosa con que se adoctrina a las masas, que incluso ha enredado y confundido a mucha de nuestra gente, nos permite comprender que el “beneficioso” paso de colonia feudal española a “repúblicas independientes”, ha sido un mero recurso discursivo; en lo concreto, tanto los intereses de España como potencia hegemónica, así como los intereses británicos en estos 200 años de capitalismo, se mantienen invariables al modelo de supremacía racial blanca; pues para este sistema de “progreso evolutivo ascendente”, todo aquello que signifique presencia indígena es retrogrado y anacrónico.
Variadas formas de invisibilizacion y guerra sucia contra el Mapuche hemos vivido en estos años.
En las últimas dos décadas ha proliferado un nauseabundo discurso integracionista foráneao: mientras desde las cumbres intelectuales del poder, se baja una línea de “inclusión del emergente indígena”; en la “america impuesta”, la violencia del extractivismo viene de la mano del exterminio indígena.
Desde el comienzo, los estados chileno/argentino ajustan sus mecanismos represivos para identificar al “enemigo interno” o “terrorismo indígena”, promoviendo la estigmatización y la persecución, con una escalada de encarcelamientos, asesinatos selectivos y desapariciones de representantes de comunidades territoriales. Indirectamente, el mismo desarrollo tecnológico extractivista también es una violenta arma de destrucción masiva que arrraza a su paso, todas las vidas visibles e intangibles; empobreciendo el hábitat de nuestras comunidades campesinas, generando un nuevo proceso de desplazamiento de personas del campo a la ciudad.
¿Conteo de personas o censo de los futuros desplazados?
Cumplidos los 5 siglos de invasión europea, el Abya Yala y Wallmapu se levantan. El llamado “emergente indígena”, es la punta del iceberg, que desde 1992, ha obligado a las metrópolis imperialistas a tener que relevar políticamente su papel en el saqueo de recursos.
En un contexto de agudos conflictos regionales y nacionales, la presencia movilizada de millones de personas bajo sus propias banderas representativas indígenas, ha obligado a los Estados a tener que escrutar por separado a las primeras naciones, para lo cual, no solo se han tenido que realizar reformas legales; sino, que hasta se llegó a promover nuevas constituciones.
Claro está, que los Censos de población indígena ocupan un papel importantísimo en la elaboración del modelo extractivista para el siglo XXI, así la pregunta: ¿es usted indígena? o ¿se reconoce perteneciente a una etnia indígena? no es una pregunta menor; es la necesaria pregunta que plantea visualizar nítidamente donde viven y se concentran exhaustivamente los “indios” y sobre todo, los Mapuche; ya que los discursos de RESTITUCION TERRITORIAL en el último tiempo avanzan. Latifundistas, gendarmería y fuerzas represivas de estado, dan cuenta de ese avance. En este contexo, las políticas represivas estatales dieron sus respuestas: Macri-Fernández, derramaron la sangre de Maldonado, Rafael Nahuel y Elias Garay justamente por la expresion POTENCIAL que significa esta recuperación identitaria y recuperación de tierras mapuche extranjerizadas. No esta demás aclarar que reconocer una identidad, implica revisar la historia; por tanto, no es solamente “un simple numero de autoreconocimiento”.
La importancia de los “indios amigos”
Ante la pérdida de credibilidad en los partidos tradicionales que se han sucedido en estos Estados marionetas, las elites del poder exigen hacer un “lavado de cara de nueva era”: incorporar para neutralizar.
Llevar el discurso del RELEVAMIENTO DE PERSONAS INDÍGENAS, es uno de sus puntos.
Prometen el mejoramiento y la elaboración de políticas inclusivas para pueblos originarios con el fin de visibilizar su existencia…Con estos argumentos demagógicos, se adhieren a esta falsa expectativa, entidades indígenas leales al Estado, prestando el rostro originario, racializado, para construir la confianza necesaria; para atraer a otrxs, mientras desde las cumbres del poder, mimetizan la extracción de datos sensibles y avanza el conteos de indios.
Este Censo 2022 difiere del anterior. Sabemos que el nuevo proyecto de orden mundial en construcción, es la apertura de un contexto histórico muy diferente a lo que se vivió diez años atrás.
En esta segunda década de siglo veintiuno, se ha definido una nueva estrategia basada en los 17 puntos del acuerdo del Fondo Económico Mundial de Davos, más conocido como la “Agenda 2030”.
En ninguna parte de esta agenda dirijida por las empresas multinacionales más grandes del mundo, se establece la idea o intención de devolución de tierras ancestrales en términos de autonomía; mucho menos el reconocimiento a la autodeterminacion indígena.
A partir de la PLANDEMIA 2020, los políticos de izquierda y derecha, se han unido para desestimar cualquier mirada critica de la A-2030, tildando de análisis “conspiracionistas” a quien busque desmenuzar sus intenciones. Bajo ese rotulo despectivo, marginan y desestiman nuestras voces. Por tanto, lo correcto para el común denominador es aceptar como verdad los engañosos discursos de normalidad, y aplaudir todo lo que se diga o “pinte” de inclusivo, indigenismo, hippie y sostendido en la voz de los indios amigos de la invasión y verdugos de sus hermanos.
Espionaje y control
Si bien la Agenda 2030 no nace con la plandemia 2020, porque sabemos que este fenómeno político global es parte de los macro acuerdos de las elites del poder muchos años antes; al leer la A-2030, salta rápidamente a la vista que el ESPIONAJE Y CONTROL es el hilo conductor de esta estrategia de manipulación de masas y que absolutamente nada está entregado al azar. Por este motivo, en el “Chile constituyente 2022” se hicieron presentes los funcionarios de la ONU, para explicar aquello que está permitido escribir en la “refundación” de chile y lo que no.
Por lo tanto, visualizar a “los indios” de un país colonial como tapa de la revista Time o contarlos/visibilizarlos en un Censo Argentina 2022 no reviste otro interés, más que saber qué política de contención y división realizarán en cada territorio, donde el extractivismo clavara sus tentáculos.
Por último, queda claro que los mercados están atentos al crecimiento del AUTORECONOCIMIENTO INDÍGENA y el por qué de su interés; pero quienes apostamos conscientemente a ese aumento genuino, JAMAS REVELARIAMOS ESE DATO ESTRATÉGICO PARA LA RECONSTRUCCIÓN DE LA MILENARIA Y HEROICA NACIÓN MAPUCHE; porque somos una Nación Independiente y en pleno proceso de volver a ser. Por dar ejemplo: imaginemos que hoy o mañana, Rusia promueve un “censo” para saber edad, sexo, ingresos, cómo y dónde se vive, la lengua que se habla, etc. y lógicamente OBLIGA a indicar si el censado es de origen Ruso o Ucraniano, en las regiones de Ucrania que hoy ocupa.
¿Alguien podría pensar que la potencia ocupante esta relevando esa información para el beneficio de las masas originarias del lugar? Para ser precisos: ninguna nación ocupada territorialmente previo genocidio, discriminada, perseguida y saqueada va a entregar alegremente información de sus hermanos y locaciones de los territorios arrebatados hasta hoy día.
¿Cómo son denominados los que así actúan, velando por los intereses del invasor, en Palestina o en Kurdistán en lucha?, No creo sean bien vistos… aquí los Mapuche, a esos, les llamamos Yanakonas
*Mauricio Nilian
Mapuche-Williche
Integrante de Educadores interculturales Mapuche del Puelmapu
Miembro fundador de UPO (2008)
Kuyun Mapu / Puelmapu (Mendoza/Argentina)
Vías de contacto virtual: correoupo@gmail.com
Grupo en Facebook: Universidad Popular Originaria (Tierra que piensa)
Notas de interés sobre Agenda 2030 y contexto:
https://www.youtube.com/watch?v=Eb94yaP6BSE
https://www.youtube.com/watch?v=rPIdjWFyjJ4
https://www.biodiversidadla.org/Documentos/El-socio-menos-pensado-Bill-Gates-desembarca-en-el-sistema-agroalimentario-argentino
https://www.youtube.com/watch?v=-OiaE6l8ysg