Angela Yvonne Davis (Birmingham, Alabama, Estados Unidos, 26 de enero de 1944) es una filósofa, política marxista, activista afrodescendiente y profesora del Departamento de Historia de la Conciencia en la Universidad de California en Santa Cruz de Estados Unidos.
En 1969 fue expulsada de la Universidad de California, donde impartía clases de Filosofía como profesora auxiliar (habiendo sido alumna de Herbert Marcuse) al descubrirse su afiliación al Partido Comunista de los Estados Unidos. Estuvo vinculada con el movimiento Panteras Negras, pero no fue parte del mismo. Se vio también involucrada en el caso de «Los hermanos de Soledad», por el cual fue incriminada por asesinato y secuestro en 1972. Este caso alcanzó repercusión mundial y tras pasar un año en prisión, fue declarada inocente en 1973.[cita requerida]
En 1974 pasó a formar parte del Comité Central del Partido Comunista de los Estados Unidos. En 1976, tras publicar su autobiografía, regresó a la enseñanza. Años después, en 1984, presentó junto a Gus Hall, el entonces líder del CPUSA, su candidatura a la vicepresidencia de su país.
Juventud
Angela Davis nació en Birmingham, Alabama, el 26 de enero de 1944, en una época en la que las leyes Jim Crow imponían la segregación racial en el sur de los Estados Unidos. Su padre, graduado en una universidad para afroamericanos en Raleigh (Carolina del Norte), trabajó algún tiempo como profesor de historia en un instituto de secundaria antes de adquirir una gasolinera que gestionaba personalmente. Su madre se graduó en una universidad de Alabama y era maestra de escuela primaria. El lugar donde vivía la familia era llamado Colina Dinamita (Dynamite Hill) por el gran número de casas de afroamericanos dinamitadas por el Ku Klux Klan.1 Tanto su madre como su padre eran activistas a favor de los derechos civiles y eran miembros de la National Association for the Advancement of Colored People (NAACP), antes de que dicha organización fuera proscrita en Birmingham.2
Angela Davis cursó estudios primarios en una escuela segregada en Birmingham, alojada en instalaciones peor dotadas que la escuela para blancos.3 A los 14 años, se le presentaron varias opciones para cursar estudios secundarios, y escogió trasladarse a Nueva York gracias a una beca de la organización cuáquera American Friends Service Committee, que ofrecía la posibilidad a alumnos brillantes de la comunidad afrodescendiente del Sur del país de estudiar en institutos mixtos del Norte. Se matriculó en el instituto privado de pedagogía progresista Elisabeth-Irwin, en Greenwich Village.4
Su llegada a Nueva York marcó una nueva etapa en su toma de consciencia política. Se alojaba en casa del reverendo William Howard Melish, el pastor de la mayor Iglesia episcopal de Brooklyn en los años 1950, opositor declarado al macarthismo y miembro de la Soviet-American Friendship Organization (Organización de amistad americano-soviética).5 Tanto él como la mayoría de los profesores estaban en la lista negra de la administración Mac Carthy, y tenían prohibido enseñar en establecimientos públicos.6
En Nueva York, Angela descubrió el socialismo por las obras de Robert Owen y el Manifiesto comunista, lo que la llevó a «situar los problemas del pueblo negro dentro del contexto más amplio del movimiento de la clase obrera».7 Militó por primera vez en una organización juvenil marxista leninista llamada Advance, que frecuentaban también sus amigas Margaret Burnham y Mary Lou Patterson. Conoció entonces a Bettina Aptheker, hija del historiador comunista Herbert Aptheker, cuya casa acogía reuniones de la organización. Participaron en las manifestaciones de apoyo al movimiento por los derechos civiles que conoció un nuevo impulso con la campaña de protesta mediante «sentadas» iniciada en febrero de 1960 en Greensboro (Carolina del Norte).8
Estudios universitarios: marxismo y feminismo antirracista
En 1962 Davis obtuvo una beca para cursar estudios de Francés en la Universidad Brandeis en Waltham (Massachusetts). Fue una de las tres únicas estudiantes afroamericanas de primer año.9 Sus estudios la llevaron a descubrir a los existencialistas franceses (Jean-Paul Sartre, Albert Camus). El curso universitario estuvo marcado por una serie de conferencias del escritor James Baldwin sobre literatura, durante las cuales se produjo la crisis de los misiles en Cuba. Baldwin se negó a proseguir y decidió hablar de la crisis en una asamblea general al lado de Herbert Marcuse, al que Angela escuchó por primera vez.10 Aquel año tuvo varios empleos que le permitieron costearse un viaje por Europa, en el que visitó Londres, París, Lausana, y Helsinki donde asistió al Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes.11
Su carrera incluía una estancia en Francia. En Biarritz, donde permaneció un mes, se enteró de que cuatro muchachas a las que conocía habían sido asesinadas en la explosión de la Iglesia Bautista de Birmingham en septiembre de 1963. Angela declaró que el atentado no era el resultado de un comportamiento racista aislado, sino la expresión de «la rutina cotidiana, a menudo monótona, de la opresión racista».12 Después de estar un mes en París, pasó el verano en Fráncfort, donde asistió a conferencias del filósofo alemán Theodor Adorno. De vuelta a Brandeis, asistió a una serie de conferencias de Marcuse sobre el pensamiento político europeo desde la Revolución francesa. Después de graduarse, y siguiendo sus consejos, decidió estudiar Filosofía en la Facultad de Filosofía de la Universidad J. W. Goethe de Fráncfort (Alemania Occidental) en 1965.13
En Alemania frecuentó a estudiantes de la Federación Socialista Alemana de Estudiantes (Sozialistischer Deutscher Studentenbund o SDS), visitó a menudo Berlín Este y participó en manifestaciones en contra de la intervención estadounidense en Vietnam.14 Mientras tanto, en los Estados Unidos el movimiento de liberación afroamericano iba evolucionando y tendió a radicalizarse en la estela del movimiento conocido como Black Power. Frustrada por no poder tomar parte en la efervescencia militante que reinaba en su país, decidió volver al cabo de dos años.
Optó por la Universidad de California en San Diego, donde enseñaba Herbert Marcuse, que aceptó dirigir su tesis, inicialmente tutelada por Theodor Adorno.15 Davis recibió una gran influencia de Marcuse, especialmente su idea de que el individuo tiene el deber de rebelarse contra el sistema injusto.
Davis es además profesora emérita distinguida del Departamento de Historia de la Conciencia de la Universidad de California en Santa Cruz, donde ha integrado el personal junto a Donna Haraway, Hayden White y Teresa de Lauretis.
En el número de febrero de 1997 de la revista gay estadounidense Out, se declaró públicamente lesbiana.
En 2006 fue galardonada con el premio Thomas Merton, en reconocimiento de su lucha por la justicia en Estados Unidos y en el mundo. En diciembre de 2014 recibió el título de doctor honoris causa de la Universidad de Nanterre, Francia.