(Por Diego Aguirre/ Radio continental de Corrientes) La situación del ciudadano italiano Marcello Doria (47) ha generado preocupación tanto en Argentina como en Italia, ya que lleva 19 años cumpliendo una condena de cadena perpetua en la provincia de Corrientes por un homicidio que él asegura continúa impune.
Doria, mecánico de automóviles, fue juzgado en 2009 junto a otros dos hombres por el crimen de Francisco Alippi (55), ocurrido en octubre de 2005 en la localidad fronteriza de Paso de los Libres, donde Alippi era remisero. Sin embargo, Marcello afirma su inocencia y solicita un nuevo juicio para demostrarla.
El caso ha cobrado mayor urgencia desde fines del año pasado, cuando el Ministerio del Interior de la Nación inició el trámite de expulsión de Argentina para Doria debido a su condición de ciudadano italiano. A pesar de haber nacido en Europa, Marcello ha vivido desde pequeño en Paso de los Libres, donde residen sus hijos y su madre.
Ante esta situación, Marcello espera una respuesta pronta de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) sobre un recurso de revisión de su condena y la posibilidad de un nuevo juicio, presentado en 2021. Organizaciones de derechos humanos de Italia y Argentina han iniciado una campaña para reclamar celeridad en esta respuesta.
El pedido de revisión ante la CSJN se basa en irregularidades durante la investigación y el juicio, como la declaración de testigos bajo tortura en una comisaría y no en sede judicial, y el reconocimiento fotográfico, práctica prohibida. La abogada de Doria, Mónica Colunga, espera la oportunidad de presentar nuevos elementos probatorios que puedan contribuir a esclarecer el caso.
Durante sus casi 20 años de encarcelamiento, Marcello ha sido golpeado en varias ocasiones, pero también ha logrado completar sus estudios secundarios, obtener una diplomatura en Economía Popular y participar en talleres de formación profesional y estudios terciarios. Además, ha promovido la apertura de espacios de formación, productivos y culturales en la Unidad Penal 1.
El reclamo de justicia cuenta con el apoyo de la ONG italiana Prigionieri del silenzio y la Red Corrientes de Derechos Humanos, quienes respaldan a Marcello y su familia en esta búsqueda de verdad y justicia.