(APL) En un atentado perpetrado en la madrugada este domingo el fuego destruyó las instalaciones de la APDH-La Matanza, ubicadas entre Esnaola y Cabrera, San Justo, en las que organismo -cuyo referente es Pablo Pimentel- realizaba tareas de gran labor comunitaria en defensa de los derechos humanos de los más vulnerables, víctimas de la represión estatal en sus más diversas formas. Expresamos toda nuestra solidaridad con lxs compañerxs. Más abajo, el comunicado de los compañeros.
«Hace un rato una compañera recibió el llamado de una vecina: «Se está incendiado la Asamblea». Quienes pudimos nos acercamos y la imagen fue terrible. No quedó nada de las casillas. Estamos haciendo la denuncia correspondiente, pero estamos en estado de alerta. Perdimos todo: las mesas y sillas de lxs pequeñxs palomerxs que vienen los miércoles. Los libros. Cuadros que para nosostrxs tienen mucho valor simbólico y afectivo. También las herramientas de construcción. El baño ya no existe. No caemos todavía. En varias ocasiones hicimos público cada hecho que sufrimos en nuestro espacio y éste es uno de los más graves. De repente, la tristeza nos invade. Nos quedamos sin palabras. Años y años de militancia para que los ataques lleguen a este punto. Necesitamos urgente el acompañamiento. Estaremos ampliando la información a medida que vayamos resolviendo esto. Mientras, difundan. Gracias».
Compañerxs de APDH-LA MATANZA