Carta de compañeras detenidas en la Unidad 46 de San Martín

San Martín, 1 de setiembre de 2011 (Agencia Rodolfo Walsh).-Carta a Karina
Hola Karina:
Más adelante en esta carta te diremos “Galle”. Si la confianza crea el clima necesario.Somos Tanya y María del Pilar, las que te escriben. Te cuento que estamos en la Unidad Nº 46 de San Martín, privadas también de nuestra libertad. Aunque, yo, tu nombre vagamente lo recordaba por ser hija de desaparecidos, Montoneros. Y en la fundación H.I.J.O.S. fuiste nombrada muchas veces. Sucede que tras las rejas la memoria se atrofia y las cosas vividas en la calle quedan en algún archivo de nuestra memoria. Hasta que en algún momento, alguien activa nuestro cerebro y vuelven los recuerdos. Tanya lleva su segunda reincidencia y en esta condena ya le lleva 2 y 6. La cana pesa, pero que te podemos decir nosotras, si vos le llevás mucho más. Yo llevo un año y medio y la verdad es que trato de mantener mi mente ocupada en cosas positivas. De tu folleto te podemos confesar que el tiempo vivido en la cárcel no disminuyó tu fuerza, tu lucha, tu sed de justicia y tus ganas de ser libre y vivir. Estamos sentadas en nuestra casa temporal, la celda 6 del pabellón 12 de esta unidad y vivimos en este sistema carcelario represor y militarizado, como vos decís y le contás al mundo. Hay cosas que no cambian y deberían hacerlo. Las cárceles presentan una forma de vida infra humana donde los derechos inherentes a las personas NO EXISTEN. Los derechos humanos se convierten entonces en desechos humanos, y a pesar de que detrás de ese uniforme hay personas, los entrenan para perseguirnos y tratarnos como en una cacería humana.Hace una semana nos tocó ver el traslado de un preso en silla de ruedas al hospital de la calle. Lo vimos vivo. Lo vimos ser trasladado como bolsa de papas por las personas que deberían cuidarnos. Lo vimos con un montón de pares de botas saltando por encima de él para no pisarlo y a pesar de la baja temperatura estuvo tirado en el piso casi desnudo, y el SPB charlando a su alrededor y haciendo bromas con el personal de sanidad como si él no existiera.Lo vimos y no lo veremos más, nunca más- Ese chico falleció al día siguiente, y de él nos llevamos la imagen de una persona, de un ser humano, en una tarde fría de invierno, temblando como una hoja, camino a la muerte.Vivimos privadas de nuestra libertad, pero también privadas de muchas más cosas: el derecho a la asistencia médica, el derecho a no ser sólo un número de ficha criminológica en jefatura y un número de causa en juzgado, el derecho a la libertad de expresión, a la agilidad burocrática y que nuestros expedientes no duerman en los cajones de un juzgado siendo olvidados, que un día en la cárcel puede ser la vida o la muerte.Es una ruleta rusa y nadie fuera de aquí lo sabe. En momentos así una se acuerda de Dios, una reza. Pero la injusticia, la impunidad y la crueldad están en La tierra y por eso queremos transmitirte este mensaje, Galle.Nosotras también estamos presas, también somos madres, novias, amigas y mujeres con la frente bien alta y con la dignidad bien puesta. Por eso querida amiga ( a partir de ahora) te decimos:
LUCHA!!!: Aun estás viva para hacerlo.
GRITA!!!: Abre tus pulmones para que te escuchen.
EXIGE!!!: Que Dios te dio una inteligencia que a otros les molesta.
Y NO BAJES LOS BRAZOS JAMÁS!!! Tienes un don: el de contagiar al mundo TU FUERZA ESPIRITUAL Y TU AMOR POR LA LIBERTAD.
LUCHA Y SIGUE LUCHANDO QUE ESTAMOS CON VOS.
Tanya y María del Pilar
 
 
 
Tanya Isabel Lencina CorreaDelegada Universitaria de la U 46
 
María del Pilar Rodríguez GarcíaUnidad 46Secretaria de Género de Lucha Antidiscriminativa