Detenidos de la U-5 denuncian torturas, requisas vejatorias a sus familiares y solicitan ayuda de organismos de derechos humanos.

Desde la organización “Libertad Manipulada” manifestamos nuestra más profunda preocupación por las reiteradas denuncias que hemos recibido desde la Unidad Penitenciaria N°5 de Cipolletti, provincia de Río Negro, donde presos y familiares vienen manifestando ya hace tiempo ser víctimas de malos tratos, torturas y abandono por parte de las autoridades judiciales y penitenciarias de dicha Unidad.

Los familiares de los presos denuncian que vienen siendo maltratados por las requisas que deben sufrir al ingresar a la unidad ya que estas son sumamente irregulares y vejatorias porque, entre otras cosas, obligan a las familias (niños, mujeres y ancianos) a desnudarse completamente a pesar de las bajas temperaturas. También denuncian ser tratadas de mala manera por personal penitenciario.
Por su parte los detenidos denuncian ser sometidos a mal trato permanente, incluso a torturas por parte del personal y que este accionar viene avalado desde el director Emilio Martínez y sus órdenes son ejecutadas por el jefe de Unidad Vázquez Ariel, quien viene de recorrer otras unidades de la provincia sumariado por torturas y malos tratos hacia los internos.

Detenidos y familiares manifiestan haberse comunicado con organismos de Derechos Humanos y que al llegar a la Unidad se les prohibió el acceso, ya que las autoridades no quieren que se vea las irregularidades que hay en la Unidad y las que pueden denunciar los internos.

También denuncian que existen mora y graves irregularidades en los informes que el servicio penitenciario debe emitir al juez de ejecución para acceder a los beneficios liberatorios ya que muchos presos cuentan con conducta ejemplar y sin embargo sus esfuerzos para resocializarse y unirse nuevamente con sus familias no son tenidos en cuenta.

Piden que el gobierno provincial brinde más educación y programas de capacitación laboral en la Unidad para así poder salir con oficios laborales.
Desde nuestro organismo hemos constatado una grave situación siendo que a los prisioneros se les prohibió recientemente el ingreso de los alimentos básicos, necesarios para el correcto desarrollo humano como ser carnes, lácteos, verduras y legumbres, y estos tampoco son provistos por el servicio penitenciario lo que significa un total agravamiento de las condiciones de detención que ataca directamente a la salud de las personas privadas de la libertad e incluso su vida, pudiendo estar al frente de un plan sistemático de Exterminio por hambre por lo que el Estado argentino podría ser sancionado.

Desde nuestro organismo convocamos a todos los organismos de Derechos Humanos tanto provinciales como nacionales a cumplir con su rol y tarea en nuestra sociedad y aprestarse a la Unidad a fin de constatar las denuncias aquí expresadas.