“El aumento del número de personas privadas de su libertad no se corresponde con un aumento correlativo del fenómeno delictivo”, aseguró la Procuración Penitenciaria en un spot informativo. Desde el organismo explicaron que “la cantidad de presos no repercute en la cantidad de delitos, es decir que un aumento o disminución de la población encarcelada no modifica el fenómeno delictivo de una región”.

“Más presos no significan más seguridad”, sostuvieron en el spot. Los problemas que enumera el organismo por el aumento de la población carcelaria son: hacinamiento, sobrepoblación, degradación de la condición humana y la utilización de sectores de recreación o atención médica como celdas.

Desde la Procuración Penitenciaria alertan que la construcción de cárceles no es la solución. Para evitar la sobrepoblación, la PPN presentó en el Congreso un proyecto de ley para evitar los hacinamientos y las violaciones de Derechos Humanos en las cárceles. Sin embargo, la iniciativa todavía no tuvo el respaldo político para ser sancionada.

Las cifras de 2013 son las últimas difundidas por los organismos oficiales acerca de la cantidad de presos. Con la nueva ley se podría conocer en tiempo real la situación verdadera de las prisiones para evitar que se vulneren los derechos humanos, es decir que el Estado por castigar un delito, cometa otro delito.

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