Inoperancia y violencia indiscriminada

Ante la solidaridad y el reclamo de sus compañeros de pabellón (no es la primera situación de incumplimiento o demora a los pedidos de de asistencia familiar por duelo) se desata una primera instancia de represión que motiva la concurrencia al lugar de casi todo el ejecutivo provincial ( Vicegobernador a cargo, Subsecretario de Gobierno, de Seguridad y jefes penitenciarios).
Se comunicaron con la madre y hermana del interno cuyo padre había fallecido, y se abre una impasse. Concurre un mediador policial. Los internos solicitan que haya también en el seguimiento del conflicto representantes judiciales, familiares y de la red de derechos humanos ( estaban en la calle junto a familiares).- Solo aparece una funcionaria judicial (que no tomo contacto directo con la población) que se informaba a través del Subsecretario Bravo, que ya nos tiene acostumbrados a mentir y a descalificar a quienes solo cuentan la verdad. A quienes estábamos al frente del penal no nos queda claro si se trata de la fiscal o una secretaria de la Jueza de feria. Entre las 23.30 y las 1.30 hubo incesantes pedidos de la población para que ingresen estos veedores, y se descomprimía el conflicto. Los funcionarios les mintieron y negaron la presencia de la red de derechos humanos aduciendo que “estaba de vacaciones en Mar del Plata). Hay despliegue policial, corridas y se informa de un supuesto intento de fuga, inexistente. El conflicto se agudiza, los internos prenden colchones. La funcionaria judicial fue y vino en varias oportunidades a hablar con la Dra Varela, Jueza de Turno, que nunca se hizo presente en el lugar. Los familiares y la Red DDHH pidieron varias veces hablar con esta persona para interiorizarse de primera mano de la situación y hasta para confirmar la disposición a ser de nexo con la población. Nunca atendió nuestros pedidos. Se desata después de las 2 de la mañana una feroz represión, con gases lacrimógenos y balas a pabellones cerrados que no tienen salida, los internos rompen muros y se atrincheran en “el central”. Avanzaron las fuerzas de choque ETOP, el PAR y el Cuerpo de Bomberos. Hubo muchísimos heridos. Les pegaron con palos, culatazos, patadas, usaron picana eléctrica (unas chiquitas de mano), hasta usaban cuchillos, para que parezca que se pelearon entre ellos… A los golpes les decían acá tenés tus “derechos humanos” . Entre las 4 y las 6 de la mañana mas de doce internos fueron llevados al hospital, se evidenciaron lesiones contusas, traumatismos de cráneo, fracturas de brazos, intoxicación con gases. Pero en total hubo casi un centenar de lesionados, TODOS por el servicio penitenciario. Hubo traslados a la Unidad 6 y a la Comisaria tercera ( los internos trasladados allí reclaman asistencia medica, ya que a la fecha no fueron revisados por médicos y están golpeados). Ya en el desarrollo de la mañana muchos mas internos fueron asistidos en enfermería. Fue el desmanejo, la impericia prepotente y la violencia de la represión lo que llevo a este desenlace. Por supuesto, ahora saldrán a hablar de intentos de fuga y motín, a decir que familiares y la Red de DDHH mienten. Por eso nos negaron la posibilidad de intermediar, y constatar la real situación. Autoritarismo, discurso unificado de los funcionarios, impedimento al accionar de los organismos de derechos humanos. Ahora nos toca ayudar a que la verdad se esclarezca….Los pocos periodistas que cubrieron el hecho en su inicio ( alrededor de las 20,30 hs) nos dijeron que desde el gobierno daban la directiva a los medios de lo cubrir el hecho para no “empañar” la fiesta del chamame… Quedara en el registro de las ignominias del estado provincial este accionar penitenciario, avalado y promovido por el Subsecretario Bravo, ante la ausencia cómplice del poder judicial.Este hecho será denunciado a foros de derechos humanos nacionales e internacionales, ante el Superior Tribunal de Justicia y sobre todo ante la opinión publica.
Por la Red de Derechos Humanos. Hilda Presman