Algunos de los hechos que pone en conocimiento de la fiscalía sucedieron el pasado 14 de enero, en tempranas horas de la mañana, en una celda de aislamiento tipo calabozo, que en realidad es un espacio de requisa que se encuentra en la zona de guardia, en el ingreso al penal, en área que está monitoreada por cámaras de seguridad y en presencia de otro interno (a quien el servicio penitenciario hace responsable de las lesiones ocasionadas). En dicha oportunidad un cabo de apellido Baroni y un oficial de apellido Medina lo golpean salvajemente con golpes de puños y patadas además de aplicarle golpes eléctricos con picana.
El cabo Baroni lo patea en la cabeza y en la espalda – sitio donde Robledo tiene lesiones y secuelas por tener alojada una bala. Matías Robledo debió ser hospitalizado de urgencia en el Hospital Escuela de Corrientes con fractura en la columna lumbar.
El pronóstico médico es desalentador, ya que producto de las lesiones podría quedar parapléjico. Su evolución dependerá de una cirugía que está programada para los primeros días de febrero. Por decisión del Servicio Penitenciario se solicitó el alta médica voluntaria y fue trasladado a la sanidad del penal hasta esa fecha, hallándose en malas condiciones de alojamiento y de seguridad, ya que se encuentra tirado en una celda, sin poder moverse y sin que lo atiendan ni siquiera para poder ir al baño.
Por su parte, Rosa Ramírez sostiene que las agresiones y el maltrato sistemáticamente dirigidos a su persona son parte de un arreglo económico entre penitenciarios y familiares de la víctima del homicidio en situación de robo, por el que está cumpliendo una condena de 25 años para terminar con su vida.
Además, refiere que tanto ella como su nuera han recibido amenazas por parte del personal penitenciario, ante la difusión del caso ante los medios, anticipándoles que si siguen hablando, pueden resultar “atropelladas” por algún vehículo, en la avenida
Luego de la presentación judicial, y la publicación de estos hechos, Rosa Ramírez hace responsable por su vida y su integridad física, la de su hijo Matías Robledo y la de sus familiares cercanos, al Poder Judicial de la Provincia, quien deberá garantizar el debido resguardo y avanzar en las investigaciones para que se determinen las responsabilidades, ya que todos los actos de la autoridad penitenciaria deben estar sometidos a la legalidad, proporcionalidad y al control judicial posterior.
Se adjuntan algunas tomas fotográficas de las lesiones, de la celda de aislamiento (requisa) y de la denuncia presentada el día 23 de enero de 2015 ante la Fiscalía Correccional y de Menores n 1 (en Feria ) de la Ciudad de Corrientes.
Tel Contacto de Rosa Noemí Ramírez, mamá de Matías 0379-4022271