Es que por el tiempo que llevaba de gestación, puesto que la niña de 12 años no sabía que estaba embarazada, que se sumó a la posterior dilatación por parte de las autoridades de ambos hospitales, los sectores antiderechos lograron finalmente que le realizaran la cesárea. El manejo del caso por parte del hospital, y la posterior decisión de realizar una cesárea, no solo extendió el sufrimiento de la menor sino que le dio, a los estos sectores antiderechos, el tiempo necesario para obligarla a parir y lograr la maternidad compulsiva. El mismo Gobernador Gerardo Morales, ante la presión de los colectivos feministas, había proclamado la cesárea como una Interrupción Voluntaria del Embarazo, como aborto no punible, contrariando la verdad de los hechos.
Por su parte, el movimiento de mujeres ya había denunciado esto como una maniobra para violentar la voluntad de la niña y su familia. Las autoridades del Hospital y los médicos, con la anuencia del Poder Ejecutivo provincial, dilataron el cumplimiento de la ley, amparándose en una supuesta objeción de conciencia, para ganar tiempo.
Queda claro que lo que la ley ofrecía como derecho para esta niña era la realización de un aborto no punible y no la realización de un parto prematuro. Se acaba de condenar a una niña de 12 años a tener un hijo que no deseaba. Para lograrlo no solo alargaron su malestar y la hostigaron para intentar hacerla cambiar de opinión También le dieron información imparcial. Según fuentes allegadas a la familia, el Hospital informó a la niña que la cesárea – pese a no ser un método abortivo recomendado por la Organización Mundial de la Salud- era el mejor método para ella, sobre todo si no quería sentir dolor. La niña quería que “no le doliera”, no “quería enterarse”. Algo que ahora sabemos imposible, si pensamos al menos, en la huellas de la intervención que la acompañara toda su vida.
Como queda demostrado, a las autoridades del Hospital y al mismo ministro de Salud, la voluntad de la niña no les importó. Es por esto, que está mañana el Ministro de Salud de Jujuy, Gustavo Bouhid, declaró a los medios locales que: “Es una bebé que ha nacido viva, está en neonatología y se va a dar en adopción. No va a entrar en contacto con la madre” como si así se solucionará el problema.
Cabe destacar que el procedimiento se llevó a cabo sin complicaciones y la menor se encuentra en buen estado de salud, según informaron desde el Materno Infantil. Sobre la salud de la neonato no circula información, puesto que se ha suspendido la conferencia de prensa que se encontraba prevista para este mediodía, seguramente para no tener que explicar como un aborto termina en un nacimiento.
Es necesario sopesar que este atropelló a los derechos de la niña, fijará probablemente un lamentable precedente, para aquellos que quieren hacer uso del derecho a abortos no punibles, que están contemplados dentro de la ley desde 1921.
Distintos colectivos de mujeres, organizaciones de Derechos Humanos y partidos de izquierda denuncian el incumplimiento de la ILE y solicitaron una audiencia con el Ministro de Salud Gustavo Bouhid para no dejar impune este hecho.