En este caso están procesados también otros seis agentes del SPF, entre ellos quienes cumplían funciones en la U.9 como director y subdirector, el jefe de Región e integrantes del servicio médico de la unidad. Estos funcionarios penitenciarios se encuentran acusados de omisión de evitar las torturas, omisión de denunciar, falsedad ideológica y encubrimiento agravado, entre otros delitos.
El 8 de abril de 2008 el detenido Argentino Pelozo Iturri fue golpeado brutalmente hasta provocarle la muerte por un grupo numeroso de agentes del SPF de la U.9 . No obstante, los médicos forenses que examinaron los restos mortales de Pelozo Iturri en un primer momento dictaminaron que aquél había fallecido de “muerte súbita” y no como consecuencia de la brutal golpiza que se le propinó.
No obstante, esta conclusión fue controvertida desde los inicios del proceso por la Procuración Penitenciaria de la Nación que reclamó de modo reiterado —en su calidad de querellante — la realización de un nuevo examen. En tal sentido, en noviembre de 2012, la PPN presentó un informe confeccionado por el médico forense José Ángel Patitó donde se afirma que la muerte de Pelozo Iturri es consecuencia de los golpes recibidos por parte de los agentes penitenciarios.
En base a este informe, el juez federal de Neuquén ordenó un nuevo peritaje al Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que finalmente corroboró de manera enfatiza la conclusión de que la muerte del detenido tenía directa relación con los tormentos padecidos.
Con esta resolución de la Cámara Federal, este gravísimo caso se encamina de forma inminente a la realización de un juicio oral y público.