La primera charla de este año tuvo lugar el 6 de marzo y la segunda el 17 de Abril, ambas en el 1º piso de la Mutual Sentimiento, Lacroze 4181,lugar donde desarrolla sus actividades la cooperativa textil – serigrafica H&M libres desde hace ya dos años.
“No queremos ser más clientes de la cárcel”
Claudio Castaño, representante de dicho emprendimiento nos contó los puntos clave de los encuentros celebrados hasta ahora. Aquí sus reflexiones.
“Entendiendo al trabajo no solo como un derecho, sino también como una de los pilares fundamentales en la reinserción de las personas que han pasado por contextos de encierro, desde estos encuentros de charla y debate se busca visibilizar la problemática real y concreta a la que se enfrentan las personas a esta situación.
Es cuestión de ser realista para reconocer que las personas con antecedentes ven muy dificultoso encontrar un trabajo en relación de dependencia o al menos no precarizado. Primer obstáculo. Realidad ante la cual muchos compañeros optan por nuclearse en cooperativas desde las cuales puedan autoemplearse y crecer entre compañeros Cabe destacar en este sentido las experiencias positivas, como la Cooperativa el Ágora, Cooperativa Kbrones, Cooperativa El alba, Cooperativa Esquina Libertad y emprendimientos pre-cooperativa RIF, Abuela Valentina Textil.
“Pero una vez decidida la vía de autoorganizarse los compañeros deben enfrentarse a una Ley discriminatoria que impide a las personas con antecedentes penales ser miembros plenos de una cooperativa (art 64 ley de Cooperativas) , además de que la ley de cupos (14301) que tampoco se cumple”.
Generar propuestas
Otro de los temas tratados en las reuniones es la capacitación y las gestiones que se realizan dentro del contexto carcelario. Desde las reuniones se busca generar propuestas concretas para agilizar trámites y, por qué no, diseñar circuitos burocráticos especiales para que cuando las personas recuperan la libertad ya se encuentren con las cooperativas armadas y un poco más allanado el duro camino de la reinserción.
Lo primero que reciben, junto con la libertad, es la frustración de encontrarse con dificultades burocráticas de todo tipo, tanto para conformar las cooperativas con un marco legal adecuado que les permita recibir los beneficios que por derecho vienen asociados, como para conseguir las máquinas con las que efectivamente puedan trabajar.
Sabemos que la realidad de una persona que recupera la libertad es muy dura, porque se encuentra con muchas trabas para avanzar. El efecto negativo que el encierro puede tener en la autoestima, sumado a la discriminación y la frustración de no poder sustentarse con el fruto de su propio trabajo pueden empujar a las personas a círculos viciosos que vulnerabilizan aún más su situación, haciéndolos susceptibles de volver a la cárcel.
La sociedad toda y las instituciones tenemos responsabilidades en esta realidad.
El objetivo de estos encuentros además de visibilizar esta realidad es fortalecer las redes para una producción cooperativa de mayor calidad y alcance.
Apoyemos a los que no bajan los brazos, a los que proponen y buscan superar los obstáculos y allanar el camino a los que vienen.
La próxima reunión está prevista para el 15 de Mayo en Lacroze 4181 1º piso, Caba