El mismo fue Director Nacional del SPF durante los años 2007 a 2011 y unos meses entre agosto 2013 y febrero 2014.
Si bien en este congreso el mismo va a participar en un panel sobre la reforma de la ley orgánica del SPF, vemos como paradójico que este sujeto este presente en la Facultad de Derecho. La moral no le da para hablar de nada en esa casa de estudios. Justo él, principal instigador de que se avasallen los derechos humanos más básicos como elementales en el interior de las cárceles no puede hablar de Derechos ni de nada en esta prestigiosa casa de estudios.
En términos de muertes y torturas, su gestión fue feroz. Marambio no sólo no erradicó prácticas de la dictadura, sino que reforzó políticamente los hechos durante las épocas más fuertes del Servicio Penitenciario.
Durante su gestión al frente de la institución penitenciaria se repitieron motines y hechos de violencia. Nombró a un torturador en un cargo y unió en Devoto a presos de buena conducta con los peores, hecho que provoco homicidios y decenas de heridos, fruto de la represión ordenada por él. Está acusado de dar privilegios a ex represores y de impedir la labor de organismos de DD.HH. en el interior de las cárceles. Muchos son los cuestionamientos y acusaciones que pesan sobre Marambio, muchas de ellas de seria gravedad. Entre las acusaciones que pesan sobre su espalda, está la de proveer de “lujos” a ex represores detenidos y de nombrar a personajes nefastos en distintos cargos operativos. Política que continúa su ex jefe de gabinete y actual Director del SPF, Emiliano Blanco.
Distintas personalidades ligadas a organismos de DD.HH., entre ellos el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Horacio Vertbisky del CELS, Francisco Mugnolo de la Procuración Penitenciaria y Madres de Plaza de Mayo ya se han expresado respecto de Marambio, un punto en común: rechazo y repudio.
Al haber obstaculizado el normal desarrollo de las actividades del programa, especialmente en el Centro Universitario de Devoto (CUD), fruto de una serie de hechos ocurridos desde mediados de septiembre de 2010, en los que se alegó que uno de los internos se encontraba involucrado en presuntos delitos, condujeron al Servicio Penitenciario Federal (SPF) a llevar a cabo acciones que supusieron un claro avance institucional sobre el Programa. Inconsultamente el SPF suspendió actividades universitarias, desplazó otras fuera de la órbita del CUD, desarmó pabellones de estudiantes, trasladó presos estudiantes a otras unidades penales, realizó un allanamiento asistido con fuerzas de seguridad en horario de clase y en presencia de varios docentes –sometiéndolos a una seria situación de tensión –, secuestró computadoras que son patrimonio de la Universidad – produciéndose incluso el faltante de varios equipos nuevos en dicha maniobra –, impidió el acceso a docentes, entre otras cuestiones de gravedad. Ello dio como un resultado un hecho histórico en el seno de la UBA: Que luego de años el Consejo Superior emitiera por unanimidad una resolución rechazando y repudiando los hechos ocurridos en el Centro Universitario Devoto, un ataque virulento al Programa UBA XXII, a la Educación misma.
Es por esto y varios puntos más que instamos a que se rechace la presencia de Alejandro Marambio en la Facultad de Derecho de la UBA, como estudiantes universitarios del CUD, como estudiantes de la carrera de abogacía de la Facultad de Derecho de la UBA y, principalmente como sujetos críticos y respetuosos de los DD.HH.
COMITÉ CENTRAL DEL GRUPO UNIVERSITARIO DEVOTO, Junio 6 de 2014