El Establecimiento Penitenciario Nº 6 “Cárcel de Procesados Varones Gral. San Martín, es una Unidad que aloja a internos Varones Adultos y Menores Adultos en calidad de detenidos y Procesados. Está asentado en La localidad de San Cayetano, distante 18 km de la Ciudad de Corrientes. Con capacidad para 220 presos tiene un porcentaje de sobre población del 15%
El pabellón 4 de máxima seguridad fue cedido a la Unidad Penal n 1 de condenados, para albergar condenados provenientes de esa unidad.
Y en el acceso al predio, se encuentra la Unidad Penal n 2 Centro de Contención Infanto Juvenil, que alberga a Menores y Adolescentes en conflicto con la ley penal.
Hechos recientes.
Pabellón: Mínina 3, de procesados
En la tarde del lunes pasado (28 de abril) un detenido Vicente Fernández, alojado en pabellón mínima 3, haciendo tareas de fajina, limpieza de los contenedores de residuos, se le cayó el contenedor en el pie. De resultas del traumatismo perdió, limpito, el dedo meñique del pie derecho. Ahí nomas le hicieron una cura de emergencia, con un par de puntos en el muñón. Hasta el momento no ha conseguido que lo llevaran al hospital ni que lo atendieran debidamente. El único medicamento que recibe es diazepan, para mantenerlo dopado, ya que no hay antibióticos ni antiinflamatorios. Tampoco hay medico permanente, ya que son guardias rotativas desde el cuerpo médico penitenciario que tiene sede en la Unidad Penal 1 de Corrientes.-
Anexo de Condenados – Máxima 4 Todos los fuego el fuego
Este martes 29 de abril 3 presos del Anexo de Condenados en la Unidad Penal 6 quemaron colchones. Según las escasas informaciones que suministra el Servicio penitenciario uno de ellos está con graves quemaduras en el Hospital Vidal y otros dos con heridas moderadas.
El más comprometido de todos es Cristian Bianquetti, de 26 años, quien presenta más del 50 por ciento del cuerpo quemado (herido en la cara y piernas). Los otros lesionados son identificados como Manuel Pereyra, de 22, y Arnaldo Fernández, de 30 años. Estos últimos fueron derivados a la unidad de emergencia del centro de salud.
Los internos habrían estado reclamando el traslado a otra unidad carcelaria. Al no tener respuesta por parte de las autoridades de la Unidad Penal de San Cayetano, habrían decidido prender fuego los colchones de un pabellón y provocarse cortes en sus cuerpos.
El fuego se fue extinguiendo y las llamas causaron las gravísimas heridas a los internos Bianquetti, Fernández y Pereyra. El más comprometido de todos es el joven Bianquetti, quien presenta quemaduras de tercer grado.
Lamentablemente hay una larga lista de incendios y muertes en cárceles y comisarías siempre atribuidos a “motines” “autolesiones” intentos de fuga o suicidios a lo bonzo que nunca se esclarecen pero dejan un amplio margen de sospecha sobre el directo accionar represivo o la inacción ante la quema de colchones como modalidad de protesta. La violencia institucional, los tratos crueles y degradantes, los tormentos que nunca se esclarecen, el encubrimiento, la complicidad y la impunidad judicial siempre sobrevuelan el Penal de San Cayetano, invisible e invisibilizado a los ojos de ciudadanos e instituciones que debieran garantizar las normas mininas de trato a personas privadas de su libertad que establecen los pactos y tratados internacionales con rango constitucional.
Antecedentes:
En el 2005, Darío Capdevila muere quemado en la comisaría 11 de Corrientes y en la comisarñia de la localidad de Esquina, pasa lo propio con Marcelo Diego Ramirez.
El caso más emblemático fue el de la comisaria 7ma, de enero del 2006, donde fallecieron quemados Ricardo Pared (17 años) menor procesado, Matias Martinez ( 16 años) detenido por averiguación de antecedentes y Diego Romero (22 años) también detenido por averiguación de antecedentes. Hugo Escobar ( 24) salvó su vida debiendo estar internado por mas de 4 meses en el Instituto del Quemado,.
José Adrián Azula falleció el 17 enero de 2011 en el Hospital Escuela, tras sufrir graves quemaduras en la Comisaría Decimotercera.
En Mayo 2012 Raúl Cardozo torturado y rociado con combustible en la Comisaria de San Lorenzo falleció en el Hospital Escuela de Corrientes por las gravísimas quemaduras ocasionadas.
En Julio de 2013, Mauro Rodríguez, de 28 años, sufrió graves lesiones en la cara, manos, brazos y orejas tras ser quemado en un calabozo de la Unidad Penal Nº 1.