Trabajo esclavo en las cárceles

Buenos Aires, 10 de marzo de 2012.-EL TRABAJO ESCLAVO EN LASRCELES.Por: Jesús Cabral
Provecto de Ley: Pedimos la reivindicación de la Ley 12. 256 de la provincia de Bs. AS. Más precisamente de los Art.17 y 36 que son confusos en sus mensajes y por ende se podrían hacer diferentes interpretaciones. Que permiten al Servicio Penitenciario Bonaerense explotar al máximo a las personas, de ambos señeros, que se encuentran cumpliendo pena privativa de la libertad en cárceles de la provincia.
 
En este breve relato dejaremos en evidencia las prácticas que el Servicio Penitenciario Bonaerense lleva aj cabo para explotar a las personas que se encuentran en situación de encierro. Realizando un acto de deshonestidad hacia lo que establece nuestra Constitución Nacional: por sobre todo en el Art. 14 bis, donde habla de los derechos del trabajador. Cabe destacar que deberemos tomar lo hasta aquí expuesto, como el principio de una Pirámide Jurídica que a continuación vamos a dejar al descubierto. Es de vital importancia evocar que en el Art. 111 de la Ley Nacional 24.660, no especifica bien cuando el trabajo es remunerado o no. Dejando entonces una brecha, para que las Instituciones de encierro sometan a las personas privadas de su libertad, a la explotación. “Prácticas que se vienen dando históricamente entre opresores y oprimidos, Karl Max”. No obstante en la misma Ley los artículos 120 – 121 en concordancia con el Art. 111 antes mencionado, hacen una especificación categórica de la remuneración del trabajo, fijando bien las pautas. Sin embargo por otro lado tenemos el Art. 36ide la Ley 12. 256; que es confuso en su mensaje ya que estipula que el trabajo remunerado dentro de la cárcel debe guardar como proporción, el salarió mínimo de un trabajador libre, pero no especifica cuando el trabajo es remunerado o no, dejando entonces una gran brecha. Por ende las Instituciones penitenciarias de las provincia de BS. AS pueden someter a las personas a la servidumbre y esclavitud. Es importante citar en este caso, que el Rector de la Universidad Nacional de San Martín Carlos Rafael Ruta dijo. “Que todo trabajo digno tiene que ser remunerado; porque la remuneración es lo que dignifica el trabajo de las personas”. Es bueno evocar que los Art. 34-35-37-39, fijan bien las pautas pero no se les da entero cumplimiento. En el Art.17 dice, que las mujeres no trabajarán durante el pre y¡ post parto contemplados en la legislación laboral vigente para el empleé público provincial. Dejando una brecha para que las Instituciones sometan también a las mujeres en situación de encierro, ya que no especifica bien las pautas. Es bueno aclarar que las mujeres madres y embarazadas eh situación de encierro no cobran la asignación universal por hijo, siendo que de lo único que prohíbe la Ley es deambular en la vía pública. Por todo ello, es importante destacar que los niños no se encuentran cumpliendo con ninguna pena privativa de libertad, y es a ellos a quienes en realidad les corresponde dicha asignación, ya que las Penitenciarias no les proveen la vestimenta y demás cosas de uso personal, es decir los bebes nacen condenados y estigmatizados por el Sistema penitenciario. Las madres y embarazadas en situación de encierro también son ciudadanas de este País, y por ende les corresponden los mismos derechos que el Estado provee para todos los habitantes. En cuanto el Art. 18, en concordancia con el Art. 1¡7 antes mencionado es claro pero no se cumple en su totalidad. De hecho, para comprobar que realmente es así como funciona la Ley de Ejecución Penal; podremos ver un sin fin de argumentos: que a continuación expondremos.
 
Cuando las personas de ambos géneros ingresan a las cárceles de la provincia de BS. AS, se le propone o I en algunos casos se le impone, realizar tareas laborales. Ofreciéndoles a cambio un peculio (el pago), que es de 30 pesos por mes; algunos aceptan porque lo consideran una recreación para no estar tanto tiempo encerrado en los pabellones y en las celdas; en otros casos para poder obtener un buen concepto de la institución penitenciaria, que los beneficie en el momento de pedir la libertad: el sistema de la cárcel está preparado. Es decir, los condiciona para que estos accedan a la explotación. En otros casos los jefes de la Penitenciarías les proponen a los internos que tengan condiciones, trabajar para ellos en puestos administrativos, para que hagan el trabajo de un oficial o guardia. A cambio les proponen; una serie de beneficios dentro de la cárcel, a los cuales los demás internos no pueden acceder. Acá podemos ver claramente como las personas venden su fuerza de trabajo para poder subsistir: aunque sea en las condiciones más precarias e inhumanas. Tenemos en las Instituciones penitenciarias, la experiencia de compañeros que se han ido en libertad sin cobrar ni un solo centavo, después de haber trabajado durante años de sus condenas. En este caso es de vital importancia evocar, que el pago se divide en tres partes iguales; peculio, fondo propio, ayuda familiar. El fondo propio es un tercio de un entero de treinta, al que el interno puede acceder solo cuando recuperas su libertad. El peculio es también de un tercio, y a lo que el interno puede acceder, pero se tiene que anotar en una boleta lo que; él mismo necesite, porque no se puede manejar dinero dentro de la cárcel. En cuanto la ayuda familiar es el tercio restante, la pueden retirar los familiares de los internos que vienen de visita a la Unidad. Es bueno aclarar que ¡hay internos que no tienen visita, en este caso la ayuda familiar se acumula junto con el fondo propio: al cual uno nunca puede acceder una vez que recupera su libertad, es decir el SPB te roba. En consecuencia de todo lo expuesto es importante recordar: “que el poder en la vigilancia jerarquizada de1 las disciplinas no se tiene como una cosa, no se transfiere como una propiedad; funciona como una maquinaria que oprime los cuerpos dóciles de las personas en situación de encierro, Michel Foucault”. Por todo ello, en las cárceles de la provincia nada de esto se respeta, y el Servicio Penitenciario Bonaerense utiliza todas estas brechas para explotar al máximo a las personas que habitan las cárceles de la provincia. No se respetan las jornadas de trabajo con horario limitado y descanso incluido, entre otras, sino todo lo contrario, los internos tienen que estar a la entera disposición del personal penitenciario, hasta desgastar’ al máximo sus cuerpos.
 
Por todo lo expuesto pedimos a la opinión pública que nos ayuden a revertir esta situación que hoy nos toca vivir a las personas que nos encontramos en situación de encierro, que formamos y nos sentimos parte de esta sociedad. Personas de ambos género que piensan, sienten, sufren y tienen ganas de cambiar, ya que nunca tuvimos la oportunidad de poder educarnos por vivir en la miseria y en una sociedad tan violenta, sumado a esto los malos caminos que nosotros mismo hemos tomado: sin embargo las cárceles de la provincia generan más; violencia. Es pertinente recordar que el Dr. Raúl Zaffaroni, Ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación dijo. “Que la criminalidad y la pobreza están totalmente ligadas entre sí, y que las cárceles son para los pobres. Que las personas se encuentran en las cárceles por no tener dinero para cubrir sus necesidades básicas, y mucho menos poder acceder a los productos que les ofrece el mercado. Que él no conoce a nadie dentro de los poderes que quiera terminar realmente con el delito, es decir, es la industria Humana”. Sin embargo a pesar de todo esto hoy hemos formado una comunidad universitaria y estudiamos Licenciatura en Sociología, en forma mixta y con personal penitenciario. En la Sedé CUSAM, que la Universidad Nacional de San Martín instaló dentro efe la Unidad n°48 de José León Suárez: nuestro Centro de Estudiantes! se llama, “Azucena Villaflor”. También contamos con 13 Talleres extra curriculares, dos de ellos gestionados por los estudiantes del Centro antes mencionado. De los cuales participan personas privadas de su libertad que pintan, cantan, dibujan, escriben, sacan fotos, hacen teatro, poesía, periodismo, entre muchas cosas más. Creemos en que la esfera pública de nuestra sociedad nos ayudará, teniendo en cuenta: “los principios de equivalencia que existen y comparten en común un determinado grupo de personas que forman una sociedad. De lo que es justo y de lo que es injusto, de lo que está bien y de lo que está mal, “Luc Boltanskí”. Por ello, consideramos que es bueno evocar todo lo hasta aquí expuesto, dado a que nos encontramos viviendo bajo un “Gobierno Popular y Democrático”. En el cual todos los ciudadanos tienen los siguientes derechos. “Trabajar y ejercer toda industria lícita; de navegar y comerciar; a peticionar a las autoridades; de entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino; de publicar sus ideas por la prensa sin censura previa; de usar y disponer de su propiedad; de asociarse con fines útiles; de profesar ^libremente su culto; de enseñar y aprender”: tal como lo establece el Art. 14 de nuestra Constitución Nacional. También queremos gozar de la igualdad ante la Ley y pedir que las cárceles sean sanas y limpias, que los tormentos-azotes, y las torturas queden totalmente abolidas, ya que así le estipula el Art. 18 de nuestra C. N. Vivimos en democracia y somos conscientes, que las torturas, servidumbres, esclavitud, y la explotación del trabajo humano no deben existir.
 
Queremos contarles que somos un grupo de estudiantes de la Carrera de Sociología, algunos ya diplomados enciendas Sociales y Humanidades por la Escuela IDAES dependiente de ¡la Universidad Nacional de San Martín. Que hoy gracias a la Educación podemos leer la sociedad en la que vivimos de una manera diferente, sentimos y creemos que tenemos las actitudes y las aptitudes necesarias para criticar a los sistemas que operan con impunidad en nuestra sociedad. Que hoy pudimos dar cuenta, que dentro de las cárceles existe el trabajo ¡esclavo, donde las personas son sometidas en gran manera a la máxima; explotación. Que por todo ello, hemos redactado un proyecto de Ley. Que todo lo que exponemos lo sabemos empíricamente y a través de la experiencia. Que consideramos que, Educación y el Trabajo digno, son las herramientas fundamentales que las personas necesitan para la superación ¡personal de cada día. Es decir, si educamos a niñas y niños: ya no será necesario encarcelar a hombres y mujeres. Pedimos a todas las compañeras y compañeros que tengan ganas de apoyar este proyecto, se acerquen al Centro de Estudiantes Universitarios “Azucena Villaflor” para poder interactuar en conjunto: sobre lo todo expuesto.