(Por Bárbara Taboada/APL) Mientras que el presidente chileno Sebastián Piñera duerme tranquilo, arropado por el cinismo que lo caracteriza, la nación mapuche no descansa: tenemos a una autoridad ancestral espiritual a punto de ser sacrificada tras 100 días en huelga de hambre y a 26 presos políticos mapuche que acompañan la demanda del machi, exigiendo ante la situación de pandemia, la aplicación del convenio 169 de la OIT, el cambio del lugar de cumplimiento de condena y el cambio de medidas cautelares a todos los presos políticos mapuche y a los presos políticos mapuche del estallido social. Tras meses en huelga de hambre, todos los lamngen (hnxs) están en riesgo de vida; pero Celestino Córdova anuncia una acción definitiva; ya que se ve obligado a iniciar huelga seca:

“Lamento mucho que tenga que entregarles mi último mensaje, en mis últimos días que me quedan, para mi sacrificio en forma definitiva, en lo que para mí será un orgullo, dar la vida por mi pueblo mapuche, por nuestra creencia espiritual, que es sagrado por sobre todas las cosas, y a lo que nunca se debe renunciar”.

En estas palabras, Celestino expresa su último acto, exigiendo al Estado chileno respete ni más ni menos lo que firmó como derechos consagrados en la Declaración de las Naciones Unidas sobre pueblos indígenas: El convenio 169 de la OIT art 7, 8, 9 y 10. NO LO DEJEMOS MORIR!

Ante la negativa de respuesta a las demandas de los 26 presos políticos mapuche que apoyan la demanda del machi: Sergio Levinao Levinao, Víctor Llanquileo Pilquimán, Sinecio Huenchullan Queipul, Freddy Marileo Marileo, Juan Queipul Millanao, Juan Calbucoy Montanares, Danilo Nahuelpi Millanao, Reinaldo Penchulef Sepúlveda y Antv Llanka Quidel, en cárcel de Angol (desde el domingo hospitalizados)

Eliseo Raiman Coliman, Matías Leviqueo Concha, Carlos Huichacura Leviqueo, Manuel Huichacura Leviqueo, Esteban Huichacura Leviqueo, Guillermo Camus Jara, Cesar Millanao Millanao, Orlando Sáez Ancalao, Damián Sáez Saez, Robinson Parra Saez y Oscar Pilquiman Pilquiman en  Carcel de Lebu.  Daniel Canio Tralcal, Facundo Jones Huala, José Cáceres Salamanca, Juan Cheuqueta Cheuquepil, Fermín Marquez Inal, Cristhofer Pino Curin y Victor Marileo Ancapi en cárcel de Temuco.

 Celestino Córdova indicó que no dilatará los tiempos: iniciará huelga seca, porque lo que aquí está en juego no es solo su salud, sino el reconocimiento de derechos a futuro de la nación mapuche y de todas las naciones originarias; las cuales entendamos, son criminalizadas por el solo hecho de defender la vida en los territorios ante la amenaza constante del extractivismo rapaz.

Actualmente Celestino se encuentra en el hospital de Nueva Imperial debido a su delicado estado de salud; el cual es extremo; ya que los daños físicos de las huelgas anteriores, sumados a estas son irreversibles. En estos momentos el pulso cardíaco es de 42 latidos por minuto.

Es importante dejar en claro que Celestino, como machi, se rehusó a recibir medicina winka (chilena o no mapuche), negándose a la imposición del suero; por tanto debemos hacer respetar su decisión. Asimismo, el machi solicita expresamente, al término de la grabación que envía como último mensaje, que no se le realice una autopsia en la eventualidad de su muerte. 

¿Dejaremos que el Estado Chileno continúe negándonos el derecho de existencia? ¿Permitiremos que la espiritualidad de un pueblo milenario muera encarcelada?

Ser machi, lamngen, padre, esposo, hijo, amigo…

Machi son las autoridades espirituales designadas por los espíritus y fuerzas de la naturaleza, cuya labor consiste en intermediar entre las distintas dimensiones del universo, a efectos de mantener el equilibrio de las fuerzas existentes.

En el ejercicio de esta función, pu Machi desarrollan la curación de enfermedades, (que son originadas por desequilibrios integrales, corporales y espirituales), protegen a los territorios de los movimientos naturales, interpretan dichos fenómenos, y en definitiva, establecen la comunicación permanente con los ngen,(espíritus-fuerzas sobrenaturales) para lograr la armonía de la vida. Es por ello que son la máxima autoridad religiosa del pueblo mapuche, constituyéndose en pilares culturales, bases fundamentales para la continuidad de la vida; y es por esto que en “La pacificación de la Araucanía” y “La campaña al desierto” como practicas genocidas de la creación del estado Chileno y Argentino, se quemaron, aniquilaron y torturaron a nuestros machi.

Los Machi son personas comunes, que han sido designadas no por sus pares, sino por los espíritus de la naturaleza para llevar a cabo su rol. No pueden desconocer dicha labor, pues no es una profesión u oficio que se elija; por el contrario, el reconocimiento de un Machi se convierte en una pesada carga que la persona debe arrastrar durante toda su vida, pues por el hecho de no aceptarla puede arriesgar inestabilidad de las fuerzas, que pueden causar estragos como enfermedades o la misma muerte de la persona o sus familiares.

Celestino Córdova es padre de 4 niñxs menores de 13 años, esposo de Luisa Marilaf lamngen que lucha arduamente para sostener el corazón de su familia. Es hijo, hermano y wentru (hombre); pero por sobre todo es machi.

¿Cómo entender la situación del Machi si a ambos lados de la cordillera, se desconoce el significado del rewe (sitio ceremonial), el rol de Machi, la interacción con los ngen del territorio? Ya no lo sabemos, pero se deberá entender, porque de esto depende su vida.

RACISMO Y CRIMINALIZACIÓN

La madrugada del 4 de enero de 2013, Werner Luchsinger y Vivianne Mackay, un matrimonio terrateniente de agricultores suizo-chilenos fallecieron tras un asalto e incendio en su casa. Por este hecho, el Machi Celestino Córdova fue condenado a 18 años en la penitenciaría de Temuco por supuesta autoría; es decir, por ser eventualmente una persona que cooperó de algún modo o que conocería a quienes estaban en ese momento y causaron el incendio. No hay pruebas concretas.
Así, una autoridad mapuche lleva 7 años cautivo sin pruebas concisas, lejos de su rewe (sitio ceremonial), de su familia, de su comunidad y en prohibición de ejercer su legitimo derecho de vida.

El machi Celestino, desde el 2014 está exigiendo lo mismo: Que se respete el convenio 169 de la OIT y se le permita cumplir condena atendiendo a sus derechos como persona originaria, en su rol de machi, en su territorio.

Esta es la cuarta huelga de hambre que lleva adelante exigiendo escucha; lo cual es un sufrimiento no solo para él, sino como ya expusimos, una tortura para su familia, comunidad y nación.

En estos últimos tres meses y bajo el actual contexto de emergencia sanitaria, hemos evidenciado que la única enfermedad que se propaga causando estragos, y a la cual debemos temer es al virus del racismo institucional; el cual fue creado por el winka (invasor) y solo trajo enfermedad a nuestra tierra.

El problema entonces,  ya no es Piñera, sino la indiferencia general.
El pueblo chileno parece no ver al mapuche, no lo reconoce: ¿Por qué no levantan ahora la wenufoye (bandera mapuche) para impartir justicia? ¿Por qué permiten la tortura?

Nuestro pueblo estuvo con ustedes cuando exigían justicia,…quizás por eso, y solo por eso, es que ustedes pudieron hacerlo.

Durante estos 3 meses, se han realizado marchas, convocatorias y diversas manifestaciones por parte de comunidades en todo el wallmapu (territorio mapuche a ambos lados de la cordillera); pero hace falta el apoyo de los no mapuche, de los pueblos de todo el mundo para que nuestro machi no muera en manos del estado; pero por sobre todo, del  pueblo chileno y argentino; ya que ambos comparten la misma responsabilidad histórica.

El mundo entero vio la tortura de Piñera al pueblo chileno, es importante hacer saber que eso no cesó, ni tampoco es que allí tuvo su origen.
Los problemas actuales del pueblo chileno son solo consecuencia de construir patria sobre raíces vivas, las cuales se busca quemar; pero no se podrá, por tanto es momento de revisión y autocrítica. Eso dará salud y armonía.

Hacemos un llamado a organizaciones, movimientos y personas afines a manifestarse, dando su voz, llamando directamente a los consulados y embajadas chilenas; a hacer todo lo humanamente posible para que se respeten los derechos del pueblo nación mapuche; de lo contrario, el silencio te hará cómplice:

Libertad al machi Celestino Córdova

Libertad a todos los presos políticos mapuche

Aplicación del Convenio 169 de la OIT

Wallmapu Libre!

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RECUADRO-  ARTÍCULO 169 DE LA OIT

Se cumplen 100 días de huelga de hambre del Machi Celestino Córdoba, autoridad ancestral Mapuche. Se pide por la aplicación del convenio 169 de la O.I.T . El respeto a los derechos de los Pueblos Originarios:

Artículo 8. 1. Al aplicar la legislación nacional a los pueblos interesados deberán tomarse debidamente en consideración sus costumbres o su derecho consuetudinario. 2. Dichos pueblos deberán tener el derecho de conservar sus costumbres e instituciones propias, siempre que éstas no sean incompatibles con los derechos fundamentales definidos por el sistema jurídico nacional ni con los derechos humanos internacionalmente reconocidos. Siempre que sea necesario, deberán establecerse procedimientos para solucionar los conflictos que puedan surgir en la aplicación de este principio. 3. La aplicación de los párrafos 1 y 2 de este artículo no deberá impedir a los miembros de dichos pueblos ejercer los derechos reconocidos a todos los ciudadanos del país y asumir las obligaciones correspondientes.

Artículo 9. 1. En la medida en que ello sea compatible con el sistema jurídico nacional y con los derechos humanos internacionalmente reconocidos, deberán respetarse los métodos a los que los pueblos interesados recurren tradicionalmente para la represión de los delitos cometidos por sus miembros. 2. Las autoridades y los tribunales llamados a pronunciarse sobre cuestiones penales deberán tener en cuenta las costumbres de dichos pueblos en la materia.

Artículo 10. 1. Cuando se impongan sanciones penales previstas por la legislación general a miembros de dichos pueblos deberán tenerse en cuenta sus características económicas, sociales y culturales. 2. Deberá darse la preferencia a tipos de sanción distintos del encarcelamiento.