A 7 años de que Gabriel Eiriz fuera asesinado por denunciar fiestas clandestinas en Pilar, este sábado 10 de octubre familiares, amigos, vecinos y vecinas de Gabriel, junto a familiares de víctimas de represión estatal y organizaciones políticas que acompañan, nos movilizamos en caravana de autos y motos por el centro de Pilar y el barrio de La Lonja para gritar bien fuerte que el pedido de justicia por Gabriel sigue intacto y que no vamos a permitir que su homicidio quede impune. La caravana de más de 20 autos y motos con más de 50 personas movilizadas, partió desde el acceso al centro de Pilar hacia su recorrido por el centro y sus paradas: Fiscalía y Municipalidad. Luego pasó por el destacamento de La Lonja y finalizó en la quinta de Gabriel con un acto de cierre emotivo —que además reconfirmó que este es el camino que la familia de Gabriel junto a vecinos, vecinas y amistades van a seguir transitando para lograr un juicio y una sentencia para todos los responsables. (Fotos: Juan Cicale)
EL RECORRIDO DE LA IMPUNIDAD:
La Fiscalía: la (in)justicia fue la primera que no cuidó a Gabriel en septiembre de 2013 cuando él mismo realizó las denuncias por amenazas. A Gabriel lo mataron el 8 de octubre de ese mismo año de la manera en que se lo dijo en sus amenazas la oficial de la PFA Pérez Argüello: “Vamos a caer en tu casa. Vas a terminar muy mal”. Hoy, 7 años más tarde, la (in)justicia sigue siendo la mayor responsable de que todavía no obtengamos una investigación seria que apunte a dar con los autores intelectuales y materiales del homicidio de Gabriel.
El Municipio: aquí denunciamos tanto al intendente de aquel entonces, Humberto Zúccaro, como al actual, Federico Achával, por no atender los reclamos que los vecinos y las vecinas de La Lonja hacían junto a Gabriel. El municipio sigue estando bien presente con sus políticas de abandono y desidia para los barrios no céntricos. Esta política es necesaria para que los negocios clandestinos del municipio—como permitir la toma de calles públicas por parte de negocios inmobiliarios y las fiestas clandestinas de Salsamendi se sigan realizando.
El destacamento de La Lonja: mientras la caravana pasaba por la puerta del destacamento en la calle Seguí al 1800, denunciamos que el subcomisario de ese destacamento, hoy comisario de San Vicente: Rodolfo Javier Sastre, fue parte del negocio clandestino que mató a Gabriel. Exigimos que la justicia lo investigue ya que no solo consiguió una nueva quinta para las fiestas de Salsamendi: la de Amelie Alicia Storani Domínguez, sino que además fue el primero que se presentó en lugar del homicidio, a minutos del disparo, y ordenó el levantamiento del cuerpo en un operativo lleno de irregularidades.
La casa de Gabi: aquí finalizó la caravana con un acto de cierre y una jornada de memoria activa por él. En este lugar es donde vamos a seguir sanando lo que duele y construyendo un camino de lucha inclaudicable junto a todos los vecinos y vecinas, amigos y amigas y familiares que se quieran sumar. Porque entendimos que solo de forma organizada, planificada y presente, podremos arrancarle a la justicia una investigación seria para dar con los asesinos y poder darles una sentencia ejemplar.
Tenemos la fuerza para torcerle el brazo a la impunidad. Ayer en la caravana, hoy, y siempre: ¡Gabriel Eiriz presente!
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