El ex agente de Inteligencia del Ejército, Eduardo “Tucu” Costanzo, deberá volver a prisión por haber violado su prisión domiciliario. El represor, de probada participación en decenas de secuestros y desapariciones, goza desde 2008 del beneficio de cumplir la condena en su casa. La decisión surge de un fallo de la Corte Suprema ante la presentación que realizó en 2018 la militante Alicia Bernal, quien vio al represor en las calles de Rosario haciendo las compras por la calle. Por ello, se inició una causa que luego de tres años tuvo un fallo de la Corte Suprema, que resolvió favorablemente. Bernal es hija de Rubén «Tito» Messiez, histórico militante del Partido Comunista desaparecido en Rosario en 1977 por la patota que integraba Costanzo. Aquel secuestro se dio frente a la Facultad de Humanidades, cuando Messiez llevaba a imprimir unos volantes del PC. Actualmente, Alicia Bernal es referente de la Comisión Antirrepresiva y por los Derechos Humanos y militante de la Agencia Para la Libertad.
En 2018, su hija Alicia descubrió infraganti al represor en la calle y patrocinada por las abogadas Gabriela Durruty y Jesica Pellegrini, exigió al Tribunal Oral Nº 1 de Rosario –el mismo que había condenado a Costanzo a cadena perpetua- que garantice el cumplimiento de la pena. Para la causa, aportó fotos y videos, con la colaboración del equipo de La Garganta Poderosa
El represor, que deberá ahora volver a la cárcel, fue condenado por su intensa participación en los centros clandestinos de detención Quinta de Funes, Escuela Magnasco, Fábrica Militar de Armas “Domingo Matheu”, La Intermedia y La Calamita. En este último lugar, en Granadero Baigorria, estuvo detenido Tito Messiez, antes de ser llevado por sus captores a uno de los aviones que tiraba secuestrados al Río de la Plata.
En la causa Guerrieri II, Costanzo había admitido su presencia en esos «vuelos de la muerte». Ante los jueces, reveló inclusive su modus operandi y contó cómo envolvía los cadáveres con frazadas para no dejar manchas de sangre en el avión. A pesar de semejante brutalidad, Constanzo había accedido al beneficio del arresto domiciliario por «razones humanitarias». Pero ahora, deberá volver a estar tras las rejas. Una buena noticia, a 45 años de último golpe cívico militar de 1976.
(Nota con material de Rosario 12)