Recientemente se realizó el 23º conversatorio que se lleva a cabo cada mes, al cumplirse 28 meses de la desaparición forzada de la niña Carmen Elizabeth Oviedo Villalba, conocida como “Lichita”, en territorio paraguayo, por un operativo de la Fuerza de Tarea Conjunta a la orden del presidente Mario Abdo Benítez. Mariana Ayala, matriarca de una familia y un pueblo perseguido fue la primera en tomar la voz. Mariana es madre de un hijo asesinado, Osvaldo, (era comandante del Ejército del Pueblo Paraguayo; dos hijas presas, Carmen y Laura; abuela de nietos asesinados: Lilian (11) María (11), Néstor (12); y quien permanece en desaparición forzada, Elizabeth “Lichita” Oviedo Villalba (14). Luego, el luchador wichí Ariel Fabián, vocero de la Guardia Whasek en Chaco, Argentina, brindó su testimonio que reclamó visibilizar las injusticias. Una vez más, la conducción solidaria estuvo a cargo de Lila Báez (Secretaría de Trabajadores Migrantes y Refugiadxs UTEP) y Fabricio Arnella, dirigente del Partido Comunista Paraguayo.

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INTRODUCCIÓN FABRICIO

Buenas noches Lila, Mariana, Ariel, a los compañeros de la Campaña Internacional, bueno, a toda la gente que siempre nos ve, es de vuelta un gusto poder compartir hoy este encuentro virtual, este 23 encuentro virtual de este ciclo internacional, por la aparición con vida de Lichita. Hoy nos convocamos pese a cumplirse otro mes; 28 meses, de búsqueda, de reclamo, de exigencia, de denuncia por la aparición con vida de Lichita. Y como decía Lila, dentro de todo por lo menos hoy tendremos la oportunidad de compartir con grandes compañeros y compañeras que han siempre estado en la lucha por la aparición con vida de Lichita, además, claro, de su abuela Ña Mariana que también ya está aquí con nosotros. Un gusto haber vernos, Lila, compañeras, compañeros.

Testimonio de Mariana Ayala, madre de un hijo asesinado (era comandante del Ejército del Pueblo Paraguayo; dos hijas presas, Carmen y Laura; abuela de nietos asesinados: Lilian (11) maría (11), Néstor (12; y quien permanece en desaparición forzada, Elizabeth “Lichita” Oviedo Villalba (14), detenida desaparecida.

AGRADECIMIENTO E HISTORIA DE NUESTRA FAMILIA

Muchísimas gracias por darme este espacio, para mi es un gran privilegio tener esta oportunidad que me dan, muchas gracias. Y yo quisiera saludar y contar un poco, en breve, la historia de mi familia y luego proseguir con la historia de mis nietas. ¿Puede ser? Si me dan tiempo, ¿no?

Queridas compañeras, queridos compañeros, de todas las organizaciones y el gremio de abogados de la Argentina: soy Mariana de Jesús Ayala López, madre de ocho hijos, en 1974 nos mudamos en el barrio San Antonio, Concepción Paraguay. Estuvimos en San Antonio durante 7 años, felices por la riqueza que tenía el río, La madre naturaleza es muy prodigiosa. Los vecinos se dedicaban a la pesca y caza de animales silvestres. Mis hijos varones pescaban por la noche después de venir del colegio ya que estaban en la secundaria con Carmen porque de día, Nito y José, trabajaban en un aserradero y Carmen trabajaba en la tienda. Comenzaron a trabajar en tan corta edad porque el padre nos abandonó. Luego, como la creciente del río cada año inundaba toda la ciudad de Concepción, especialmente en la zona periférica, porque estábamos a orillas casi del río Paraguay. La pastoral social, teniendo en cuenta que cada año se sumaban más damnificados, ellos gestionaron y consiguieron un asentamiento donde nos mudamos todos los damnificados en San Francisco. Vivimos ahí 25 años. Construyeron mis hijos una linda casita de madera con la ayuda de los grupos juveniles de San Antonio.

Carmen estaba en prisión en el Buen Pastor. Ya tenía su hija Claudia y luego nació Néstor Alcides. Néstor Alcides nació en la cárcel, creció luego. Sus tías los llevó a nuestra casa en San Francisco. Con Claudia, que ya era la más grande. Luego nacieron Lichita y Ana. Al año y tres meses ya las tías me trajeron en mi casa. Le cuidamos. Yo, me quedaba en casa con las mellizas mientras las tías estaban en su trabajo de mañana y tarde. Y de noche, en el colegio. Lo que más me ayudó fue mi hija Rosa.

NÉSTOR ALCIDES

Néstor Alcides fue un niño que le quería mucho a su madre. No quería dejarla cuando iba a visitarle y lo teníamos que traer de alguna manera en el colectivo, llorando. Entonces yo le ponía en mi regazo y le contaba la historia de los pollitos. Y así se calmaba. La historia de nuestra familia es muy dolorosa. Es muy dura.

LAS MELLLIZAS: ANA Y LICHITA

Luego que las mellizas Ana y Lichita, era la mayor la ayudaba a Anita. Mis nietas y nietos nunca fueron para mí una carga porque todo lo hicimos con amor. Tengo tantas anécdotas que contar. Una noche Lichita se va a mi pieza, me cubre con la frazada, me despierto y la encuentro a Lichita. Tan contenta me puse, que nos abrazamos! Le dije: ¡este es un acto de amor! Otra anécdota más: cuando era pequeñita ya era hora de comer y, por su propia iniciativa, se prendió de la silla y lo arrastraba hasta alcanzar la mesa, una y otra silla. Luego ya le he visto con el plato cargado, venía ya a poner la mesa. Eran dos platos, uno era para su abuela y otro para ella. ¡Qué privilegio! ¡ Qué satisfacción me dan esas niñas y esos niños que tenía! ¡Qué hermoso ejemplo para la humanidad! ¡Tan lindo era todo eso!

PERSECUCIÓN A LOS NIÑOS POR EL ESTADO INFANTICIDA PARAGUAYO Y POSTERIOR EXILIO

Después tuvimos que salir porque ya no era posible nuestra estadía en la ciudad de Concepción porque mis niños y niñas que se iban a la escuela eran perseguidos por los policía, les sacaban fotos. Después ya les dijo que iban a sufrir accidentes. Entonces no teníamos otra opción que salir. Nos fuimos a Clorinda, que salimos por primera vez, nos mudamos a la Argentina y ahí mi nieto me dijo: “abuela, yo le he visto al policía paraguayo”. Y entonces me dijo por lo visto ellos pasan y pasan acá. Él ya tenía miedo. Y un día se fue porque las tías estaban muy ocupadas, no le podían acompañar a la escuela y se fue sólo. Y al verlo a él, al ver la patrullera paraguaya él se corrió. Pero después lo alcanzó y le invitó para que suba pero él no quiso. Entonces tuvo una cosa en la mano que le roció por la cara y después ya vino enfermo. Se enfermó y murió muy pronto. Era un niño muy bueno, muy dulce. ¡Como todos los niños! Como todos los niños y las niñas son dulces, son humanos, solidarios. ¡Es tan hermoso sentir el cariño, el afecto de estos niños! Y más todavía si son mis nietos, verdad? Que es para mí, era para mí muchísimo.

LILIAN, MARÍA Y LICHITA Y EL ASESINATO DE OSVALDO VILLALBA, HIJO DE MARIANA.

Y después Lichita que se fue, la acompañó su tía. Se fueron varias niñas a Paraguay para visitar a los familiares y ahí pasó lo que no tenía que pasar. Mis dos niñas, mis dos hermosas niñas, María Carmen y Lilian fueron masacradas, torturadas, fueron el peor crimen que pudieron sentir en su vida. También un dolor inmenso que quedó en mí porque también mi hijo ya no está (Comandante Osvaldo Villalba). El que amó tanto a su patria que dio su vida por ella. Porque el Paraguay está mal, está mal. Hay mucha hambre, hay mucha miseria, hay mucha enfermedad. Mientras los ricos se llenaban los bolsillos, los bancos abarrotados. Ya no había lugar para los dólares y el pueblo paraguayo, sufriendo hambre. Es terrible, es doloroso.

MENSAJE DE ESPERANZA PARA CONTINUAR LUCHANDO

Por eso no tenemos que cansarnos, seguir luchando, seguir manifestándose para que ésto cambie. Y alguna vez va a cambiar, yo sé eso, no pierdo la esperanza de que alguna vez vamos a vivir en paz, cada uno en su país, disfrutando de la naturaleza, de la amistad, de la vecindad que tan lindo es, tan hermoso es saludarse, visitarse. Es muy lindo y todo eso perdimos. Pero acá hay muchas personas muy solidarias que yo también admiro y respeto y valoro muchísimo. Tengo tantas cosas que decir pero no conviene que alargue mucho porque hay otras personas que también tienen … Muchas gracias. Me escuchaste, ¿no ? Qué bueno, qué bueno, porque hay momentos que parece que hablo muy despacio.

INTERVENCIÓN DE LILA BÁEZ .

Esta persecución que sufrió tu familia, la familia Villalba, y sobre todo las infancias de la familia Villalba, que de por sí la familia Villalba también tiene toda una persecución histórica por parte del Estado paraguayo. Esta migración forzada que vos hablás que dejó una imposición. La migración tiene que ser una opción y no una imposición porque se ve en peligro las infancias, de las niñas, niños, de las criaturas de nuestras casas. Me parece que es muy importante porque hay mucha estigmatización sobre toda la familia de ustedes, en Paraguay. Los medios hegemónicos de comunicación están todo el tiempo demonizando a Carmen Villalba, a sus hijas, a sus criaturas. Esto mismo que comentabas recién que la policía paraguaya se cruzaba a la frontera, hostigaba a Nestito, al hijo de Carmen que fue asesinado a los 12 años, rociado con veneno. Y eso me parece que no se sabe mucho en Paraguay. Por eso es tan importante para nosotras y nosotros también este espacio, porque rompe el cerco mediático, porque la idea no es sólo colocar la desaparición de Lichita, obviamente, la responsabilidad del Estado de la Fuerza de Tarea Conjunta que asesinó a estas dos niñas, las fusiló, las presentó como guerrilleras, las vistió como guerrilleras, las presentó en un momento como mayores de edad y que, finalmente gracias, como vos bien lo colocabas al pueblo organizado, a también al pueblo organizado internacional, se pudo colocar que estas niñas eran tus nietas y que obviamente eran menores y que tienen documento argentino aquí en la Argentina. Me parece que son cosas que, bien o mal en este pueblo paraguayo que sufre tanto la violencia del sistema capitalista y de un Estado que está absolutamente cooptado por el stronismo, aún, pasan estas cosas que no se quieren incluso involucrar en los espacios a debatir, a dar este debate, que puede ser medio empantanado pero que tiene que darse. ¿Qué pasó con las niñas? ¿Dónde está Lichita ? ¿qué pasa que nadie da respuesta? Qué pasa que el pueblo tampoco se sacude de este largo silencio hacía una pregunta tan contundente que todos los meses al menos nos hacemos y se hacen seguramente ustedes cotidianamente: ¿dónde está Lichita?

MARIANA (2 PARTE)

NO HAY QUE PERDER LA ESPERANZA PORQUE NUESTRA HISTORIA PARAGUAYA ESTÁ TEÑIDA CON SANGRE

Sí, asimismo es. Es vergonzoso, es doloroso, es sentirse impotente, con dolor. Pero nunca hay que perder la esperanza. Porque nosotras, nuestra historia paraguaya, está teñida con sangre. ¿Por qué?, porque vino la guerra del exterminio, la guerra de la Triple Alianza en que varios países, pero con la dirección y apoyo económico de los ingleses, o sea, de la potencia occidental, vino para exterminar y no lo pudo. Y conste que no tenía la capacidad que tenía esa potencia, por todos los armamentos, por todas las tropas, los soldados que tenían eran mucho más superior. Pero el valor del hombre paraguayo y de la mujer paraguaya le superó, le superó. Le superó ampliamente porque el que era presidente, el mariscal López, él, creo que es el único en el mundo que dio su vida por su país. Y que las las heroínas de Piribebuy, las mujeres que se lanzaron en el pozo donde estaban, sus compañeros, sus hermanos, sus hijos muertos, a quienes ellas le estaban acompañando, de repente dieron un grito de dolor, de impotencia, de rabia, que comenzó a lanzar botellas rompiendo por las cabezas de los soldados, de los negros, y lanzando también arena y, de esa manera, porque el ejército ya no tenía más nada, porque ya estaban muertos porque ya no tenían más balas y para resistir, para mantener esa resistencia, ellos estaban usando fruta de coco, piedras, pedazos de vidrio, pedazos de hierro, que metían para poder resistir, aguantar. Mientras que los soldados con sus bayonetas, soldados brasileros con sus bayonetas que brillaban al sol, dicen, vino y se posesionó sobre la defensa paraguaya y ahí las mujeres les sorprendió, los asustó a los imperiales que estaban ahí, eufóricos, triunfando, vitoreando su triunfo. Ahí comenzaron ellos a escuchar el grito desaforado, el grito desesperado, ese grito de rabia, de impotencia, que lanzaron botellas que se rompían por las cabezas de ellos, les lanzaban tierras, arenas que les cubrían los ojos y no podían ver. Y bueno, ese es el valor, ese es el valor de la mujer paraguaya que estaba con sus muertos. Porque ellas son así, la mujeres paraguayas yo sé que, yo estoy conociendo ahora la historia paraguaya a través de todo el dolor, de todos los golpes que sufrí, estoy aprendiendo y voy a ir conociendo más, no solamente de las paraguayas sino también las argentinas, las bolivianas, las peruanas, todas son mujeres valientes que en ese momento enfrentaron, enfrentaron, con firmeza la situación para acompañar, para luchar al lado de sus compañeros, de sus hijos, de sus maridos. Y yo creo que eso es importante. Y yo creo también, por eso no pierdo la esperanza de que vamos a seguir adelante porque tiene que ser así porque tenemos que mirar el futuro de nuestros niños y nuestras niñas.

ME PREOCUPA EL FUTURO DE NUESTROS NIÑOS Y NUESTRAS NIÑAS

Que también me preocupa esa alimentación industrial que se les da, porque no tiene otra. Eso con el tiempo les va a enfermar. Porque la industria no vende alimentos nutritivos sino vende placer de comer. Yo aprendí de Carmen, estoy aprendiendo mucho de Carmen también en eso, porque me preocupa la salud de todos los niños y de las niñas. ¡Qué futuro tienen si no están bien alimentados! ¡Cómo van a estudiar, cómo van a trabajar, cómo se van a defender! Hay un desafío muy grande que enfrentar y tenemos que enfrentar, tenemos que apoyar a todos nuestros niños y niñas para que sigan adelante. Porque está también el desafío del medioambiente. Que también es bien duro pero ¿qué le estamos dejando? ¿qué le estamos dejando a nuestros niños, a nuestras niñas? Es, es muy fuerte todo, pero no tenemos que perder la esperanza de que alguna vez todo va a cambiar.

TESTIMONIO DE ARIEL FABIÁN

VOCERO DE LA GUARDIA WHASEK EN CHACO, ARGENTINA DE LA ETNIA WICHÍ

BUSCAR JUSTICIA

La verdad es que es un gusto también poder participar, esta es la primera vez. Bueno, pertenezco a una etnia que es la etnia Wichí, de acá de Argentina, Chaco. Y bueno, yo creo que esto es la manera de poder justamente llevar la solidaridad y también a su vez entre países limítrofes lo que podamos de alguna manera hacer hincapié ésto ¿no?, de buscar justicia más que nada.

TENEMOS VARIAS DESAPARICIONES DE LAS QUE NUNCA HUBO JUSTICIA

En principio yo creo que de esta manera, es bueno de justamente a que sea visible, público, todas estas cuestiones son cuestiones, digamos, que pasan en Paraguay, pasan acá en Argentina. Lo vivimos diariamente. La verdad que preocupa estas cosas como si bien estaban hablándonos de esta desaparición, de estas dos nenitas. La verdad que es terrible. Nosotros tenemos también varias desapariciones que nunca hubo justicia. Hace poco comentarles de que tuvimos la desaparición de Salustiano Giménez. Aquí estamos a 80 km de donde desapareció ese jóven wichí. Y desapareció y desapareció. O sea, acá hay responsables, el único responsable es el Estado. Y el Estado que siempre se esconde, siempre son los que mayormente son los que no quieren hacerse el cargo de todo lo que está pasando. Y bueno, comparto con lo que decía la señora, la abuela, de que acá, digamos, en esta patria grande, como decimos, la verdad que habría que unir los lazos. Acá ya creo que no entra ni raza sino que simplemente como seres humanos y poder de alguna manera visibilizar todas estas cuestiones ¿no? Así que, decirles eso ¿no? pedirles la ayuda así como ustedes, damos todo el apoyo para que justamente aparezca Lichita. Y eso es doloroso, yo entiendo. Seguramente los familiares que ya hace bastante tiempo, según lo que yo escucho, hace bastante tiempo y es doloroso, nos pasa a nosotros como pueblo wichí de aquí en la Argentina. Eso es no hacerse cargo de una semejante, una semejante … Aquí lo que siempre estamos diciendo es que no hay políticas profundas como por parte de la seguridad, por ejemplo, ¿no? Y si lo hacen seguramente en complicidad con distintas organizaciones criminales ¿no? Entonces ésto, a veces repudiamos y al repudiar siempre pasan o desapariciones o muerte o lo que fuera, ¿no? Así que es la primera vez que participo ésto y bueno, sepan disculpar, no sé si me entenderán o bueno, aclarar que pertenezco a una etnia, bueno, y una etnia que trato todo lo posible de transmitirla en castellano.

ARIEL FABIÁN (2 PARTE)

NOS SENTIMOS INVISIBILIZADOS. ES NECESARIO VISIBILIZAR TODAS ESTAS CUESTIONES.

La verdad es que hay que seguir con estas luchas, hay que visibilizar todas estas cuestiones. Y me alegra que nos puedan incluir. Agradezco porque por ahí nos sentimos invisibilizados. Pero gracias a ustedes, gracias a las organizaciones que por ahí, de alguna manera, tratan de que se vea ésto en esta Argentina que siempre estamos hablando que los políticos dicen de practicar la democracia, practicar al no odio, al no racismo y sin embargo siguen haciendo ésto del exterminio silencioso, muchas veces. Y bueno, ante eso denunciamos y bueno, que todos podamos, de alguna manera, visibilizar estas cuestiones. Agradecerles a ustedes y bueno ojalá que también no sea la última vez que pueda participar. La verdad que me siento contento y ojalá tenga otra oportunidad ya más detalladamente. Ahora es como que así no más, aparte es la primera vez de estar algo así, a través de una plataforma, nunca. Como sabrán acá no hay mucho internet, no hay una buena señal pero ahora, gracias a Dios, podemos justamente que podamos intercambiar y escucharnos entre compañeros o hermanas. Bueno, muchísimas gracias.

PALABRAS FINALES DE MARIANA

Solidarizarme con los hermanos indígenas de la Argentina, y mucha fuerza, mucha unión, mucho esfuerzo, no se entreguen por favor, debemos seguir unidos y luchar todos juntos para salir de este abismo en que nos metieron. Y me duele mucho escuchar. Y no solamente en la Argentina, en Paraguay sucede la misma cosas. Es humillantes verle a indígenas en medio de tanta miseria, en medio de tanta orfandad, porque ahí los campesinos paraguayos deberían estar unidos. Pero la situación en que nos metieron los españoles, nos quitaron nuestra cultura, nuestro guaraní que es tan dulce, que es tan rico (palabras en guaraní). Entonces, no perder el idioma, no perder las costumbres, la agricultura. Es todo muy bien programado por el sistema capitalista que nos arruina, nos quiere arruinar. Pero no nos van a arruinar, nos van a hacer cada día más fuerte. Porque los golpes más duros , nos hace más fuerte. Con más firmeza, con más decisión, tomemos la historia, estudiemos, enseñémosle a nuestros niños, a nuestras niñas nuestra historia, nuestra cultura que es muy importante. Porque yo veo que en Perú, eso es lo que le fortalece, esa cultura indígena. Tan importante porque tiene raíz profunda y convicción de su cultura, de su tierra, de su país. Por eso muchos, muchos indígenas murieron en esa lucha donde todos, las gentes de la ciudad y del campo se unieron. ¡Y qué ejemplo nos dan! ¡Qué lección nos dan, esas personas que perdieron a sus familiares! pero que siguen de pie. Y ese es un lindo ejemplo que tenemos que seguir nosotros. Todos los países americanos, los países americanos eran siempre unidos, después el sistema nos separó todos, tenemos que volver a nuestra cultura a nuestra alimentación nativa, tradicional porque eso es saludable para nuestros niños y nuestros niños y también me preocupa mi hija que está en la cárcel y que no cometió ningún

delito y que tiene a sus hijos acá con nosotros que reclaman todos los días, le duele a ellos la ausencia de la madre porque son pequeños todavía pero en medio de todas esa incertidumbre ellos siguen en la escuela. Porque mi hija Miriam le apoya, le acompaña para que ellos puedan seguir estudiando. Porque si no hay estudio no hay nada, no tenemos futuro sin estudio. Por eso es importante, que se estudie que se lea, que tengan hábito a la lectura desde chico. Es muy importante eso, leer, porque es el desafío de ahora, que prepararlos para que sean solidarios, para que se esfuercen, que amen el esfuerzo, para que no se entreguen, para que no vayan por mal camino. Porque hay muchos niños y niñas que están en la calle, robándose. Es terrible todo éso.

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INFORMACIÓN SOBRE LA PRÓXIMA CAMPAÑA

Por su parte, Lila Báez brindó como continúa la campaña.En el marco de la desaparición forzada de Lichita, se informa que Carmen Villalba, el año pasado, presentó una denuncia frente a la fiscalía de Derechos Humanos del Estado paraguayo, una denuncia formal peticionando que su hija sea buscada bajo la carátula de desaparición forzosa. Hoy, frente al cambio del fiscal, Emiliano Rolón, que asumió hace pocas semanas, vuelve a presentar una denuncia frente a la fiscalía de DD.HH del Estado paraguayo para que sea investigada la desaparición de Lichita como una desaparición forzosa. Instamos al Estado paraguayo que de una respuesta a esta madre que desde su prisión ilegal, en la cárcel del Buen Pastor, tenga respuesta. Esta campaña internacional acompaña el pedido de búsqueda de su hijita quien tiene 28 meses desaparecida de manera forzosa, que fue vista por última vez como dice la denuncia el 20 de noviembre por su tía Laura Villalba. En este marco, las distintas organizaciones que formamos parte de esta campaña, estamos juntando adhesiones para presentar esto de manera presencial. En Paraguay estaremos comunicando por las distintas redes de nuestra campaña cuándo estaremos haciendo esta presentación. Pero también instamos a quienes nos escuchan, a las organizaciones de la Argentina, de Paraguay y del mundo que acompañan siempre el pedido de APARICIÓN CON VIDA DE LICHITA, que sumen sus adhesiones, tanto de sus organizaciones como a título personal, para que podamos ser más de 1.000 firmas diciéndole al Estado paraguayo que queremos que dicho Estado de verdad nos dé respuestas sobre la desaparición forzosa de Lichita, y sobre todo, señalar que quien dio la orden de asesinar a las dos niñas fue el presidente Abdo Benítez y que tienen que ser investigados.