«¡Ante la feroz embestida! Por parte del poder judicial, acompañando la falsa titularidad del inmueble que habitamos con mi familia por más de 44 años, en nombre de una tal Úrsula Basset, funcionaria del gobierno de Milei, hoy me veo en el compromiso de visibilizar nuevamente el accionar de estos personajes impunes que forman una gran mafia inmobiliaria, cuya finalidad es apropiarse de los inmuebles de forma ilegal, amparados por la vista gorda del poder político y judicial que encabeza el magistrado Ramiro Güiraldes.
Desde este momento me declaro en pie de guerra, debido a que la notificación del desalojo ya tiene fecha 28/10, sin importarles el derecho de los menores que actualmente se encuentran en edad escolar y en pleno proceso de estudio.Contacto: 11 69323654
Me están negando ese derecho, por lo tanto, a partir de hoy empiezo otra lucha contra este maldito sistema. Voy a resistir este desalojo porque no respeta los derechos de mis nietos.
¡!Necesitamos tu presencia, estamos resistiend en Raulet 66 CABA!!
No al desalojo!!! No a la mafia inmobiliaria!!! Fuera el capitalismo!!!
Alfredo Cuellar es un padre que reclama por el esclarecimiento de la muerte de su hija, “La China”, asesinada el 23 de diciembre del 2012 en la Unidad Penitenciaria IV de Ezeiza. En estos años, nunca recibió la confirmación de parte de la fuerza de custodia de las causas de la muerte de su hija, incluso pretendieron obligarlo a firmar que fue un suicidio. Alfredo Cuellar puso cuerpo y voz a la búsqueda por la verdad, y sobre todo a la memoria de su hija y de tantas otras que este sistema de miseria encierra y asesina en las cárceles. Generó dos hitos en la proclama del ala mas combativa del movimiento feminista: “Ni una menos, también en las cárceles” y “No estamos todas, faltan las presas”. La situación judicial de Alfredo está atravesada por el hostigamiento y la persecución política que sufre desde hace más de una década, cuando comenzó a denunciar el asesinato de su hija. Hoy, otra vez, está amenazado y puede ser desalojado por el juez Ramiro Güiraldes. Esto lo dejaría en la calle a él y a toda su familia, incluyendo a sus nietos menores de edad. Frente a esta situación, Alfredo llama a resistir el desalojo.