De Villa María, ATE, CTA, Utem (municipales), Cacho Mengarelli, Jesús Chirino, compañeros siempre presentes, Camilo Rodríguez, Elvio Toscano, entre otros. De Còrdoba llevaron su solidaridad, Viíìn Baronetto, siempre comprometido con las causas justas, Hernan Puddu del PTS, el Vasco Orzaocoa y Fernando Luna de la Coordinadora Antirrepresiva por los Derechos Humanos y dos compañeras de la Coordinadora Anticarcelaria.
Pero sin dudas hay presencias que siempre conmueve, fue la de Teresita, mamá de Víctor Barbero, que a punto de cumplir ochenta años, no ha faltado a las actividades y reclamos por la libertad de su hijo, sean donde sean, como fueron las de Corral de Bustos, Villa María, Córdoba, Buenos Aires, etc. A ella también la condenaron a vivir sin su hijo los últimos años de su vida. Emociona verlo a León Etchegaray, ex preso de esta causa, que jamás abandonó a sus compañeros en cautiverio. Y también impactó la presencia de Gladys Rosales, compañera de Víctor de la secundaria, que cada vez que pudo se sumó.
Los compañeros, Fueron condenados sin pruebas, o mejor dicho con pruebas tan falsas como ridículas, como la de haber encontrado un botella de plástico con combustible, totalmente intacta, adentro de un auto completamente quemado. Porque el poder judicial y el resto de las instituciones tienen que dar un castigo ejemplificador para que no osemos revelarnos ante tantas injusticias, y corrupción, ante tanta mafia organizada.
Uno de estos señores feudales, el fiscal Viramonte, está con un jury de destitución, pero no por su mal desempeño en este caso, sino en varios otros. Con el destierro dado a los compañeros que cuestionaron el poder judicial, parece ser que hay acuerdo.
A menos de dos horas de habernos retirado de allí, el director del penal, dueño y señor de la cárcel y de las personas encerradas allí, con màs poder que el mismísimo poder judicial, decidió enviar a Víctor Barbero a una prisión semi abierta, a Monte Cristo.
También son las autoridades de la cárcel y del juzgado de ejecución, quienes violan los derechos de los detenidos. De los compañeros que fueron liberados anteriormente, ninguno de ellos pudo gozar de salidas transitorias, o pasar a un establecimiento con un régimen menos represivo.
Uno de los compañeros, todavía privado de su libertad, Marcelo Farías, ya podría estar gozando de libertad condicional, pero todavía lo retienen y ni siquiera pudo disfrutar una salida transitoria para visitar a sus hijos, ya que la familia, debido a la situación económica y a la distancia, muy pocas veces pudo visitarlo, y de esas pocas veces, a su compañera no le permitieron ingresar porque le faltaba algún papel de los interminables requisitos requeridos por la institución.
Tampoco se le atenuaron las condiciones de encierro previstas para el período de prueba. Y todo porque es el que más ha reclamado contra los atropellos del servicio penitenciario.
A los compañeros de Corral de Bustos, como al resto de los detenidos, se les vulneran sus derechos básicos.
Por la inmediata liberación de los compañeros que aún permanecen en esta mazmorra, Marcelo Farías, Néstor Pasquini y Víctor Barbero!!!