(Por Oscar Castelnovo/APL) Facundo, de 20 años, fue fusilado de cuatro balazos disparados por efectivos de Gendarmería, ante el silencio del Poder Ejecutivo Nacional de quien depende esa fuerza de Seguridad, este miércoles en el Bajo Flores. Luego de la ejecución, los gendarmes rodearon el cuerpo del joven y no permitieron que le den los primeros auxilios ni que se acerque su familia en estado de desesperación. La ambulancia tardó una hora en arribar y Facundo murió al llegar al hospital Piñero.
Por su parte, la jueza Alejandra Allaud, abrió una causa penal por “averiguación de causal de muerte” y dispuso que investigue la Policía de la Ciudad. Como puede apreciarse, la unión familiar entre el Poder Judicial y las fuerzas represivas se fortalece con la sangre de cada pibx que el Estado asesina en una férrea y creciente continuidad a lo largo de toda la etapa, dizque, constitucional.
Mientras el crimen se cometía en el Bajo Flores, la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, se reunía con la plana mayor de Gendarmería para celebrar el accionar de miles de gendarmes en fronteras y barrios populares brindando “seguridad” en el contexto de la pandemia del Covid-19.