(Texto y fotos: Juan Cicale/APL) Los hermanos Wichis se reunieron con otras comunidades hermanas, este domingo, con el fin de compartir sus opiniones en relación a sus reclamos en Buenos Aires, luego de llegar caminando desde Tartagal, Provincia de Salta. El cacique Jorge, del Movimiento Alicia Loira relató que la idea de los 17 miembros de la comunidad era ser recibidos por el Presidente de la nación. Este objetivo no se logró puesto que fueron recibidos por instituciones intermedias como el INAI y el Ministerio de Asuntos Agrarios. En ambas instancias lograron avanzar con respecto a viajes anteriores, pero saben que hasta que las promesas no se conviertan en hechos, solo son promesas. «Nos reciben porque venimos, sino de nuestras comunidades nadie se acuerda. Es necesario que de ahora en más seamos nosotros quienes administremos todo lo relacionado con tierra, vivienda, trabajo, salud, educación y todo aquello que nos corresponda. El gobierno nacional y el provincial deben ponerse de acuerdo, pero entender que nosotros ya estábamos en estas tierras. No pedimos todo el territorio argentino, sino que respeten los lugares donde vivimos», expresó Jorge.
Luego, el referente indicó que «los relevamientos de las tierras queremos hacerlo nosotros y administrar el dinero que se destina con ese fin. No necesitamos representantes. Queremos que sepan que todos nuestros proyectos los hacemos para todas las comunidades y para lograrlo debemos estar juntos. No queremos más desalojos. Vamos a participar de la Mesa de Diálogo Provincial como integrantes de la APDH».
Por su parte, la hermana Illañan María Ochoa, hermana de la comunidad Marka Wuasi de la ciudad de La Plata, resaltó el esfuerzo de los Wichis y aseveró que «no podemos aceptar más la discriminación, ni que nos sigan diciendo que no hay presupuesto; durante los dos años de pandemia no han invertido un solo peso. Sumo mi clamor para que logremos estar todos juntos».
Jacquelin de la comunidad Tres Ombúes de la Matanza habló del lugar Sagrado que ellos sostienen en Ciudad Evita y la necesidad de difundir esta reunión.
Fernanda, de la comunidad Tupí Guaraní, vino a expresar su apoyo y dijo que era de vital importancia dar un lugar a la educación de los jóvenes.
Santos Piutrillan, de la comunidad Lof Mapuche Tehuelche, de Santa Cruz, afirmó que «deben entender de nuestra existencia, como pre existentes de los estados, que la ley 26160 sea ley y deje de renovarse cada cuatro años».
Un miembro de la Agrupación Jallalla Juventud, Quechua Aymara, expresó que» no podemos andar más mendigando, violentan nuestros derechos, los funcionarios cobran sueldos de privilegio. Yo quisiera que ellos vengan a vivir a nuestras comunidades y no vivir como ricos».
A su turno, Mariana Amaru, de Warnikura Sikuri, Kolla Quechua, remarcó que «venimos a mostrar nuestros instrumentos musicales y vestimentas que nos quemaron; a decirle NO a quienes nos evangelizaron y a los evangelistas como nueva religión. Debemos defender nuestro patrimonio, autonomía e identidad».
Javier Del Arenal, General Mosconi, habló de «la necesidad de ser independientes de las instituciones oficiales, confiar en nuestra propia fuerza como única herramienta para defendernos de más de 500 años de intento de dominación».
Rodolfo, ‘hijo de la generación del 70, manifestó: “parece que con los hermanos Wichis estábamos esperándonos para encontrarnos, porque ellos y nosotros queremos lo mismo, vamos por el mismo camino”.
Y al finalizar el encuentro nos encontramos hermanados en la música y el baile.
BASTA DE GENOCIDIO A LOS PUEBLOS ORIGINARIOS
EL ESTADO ES RESPONSABLE