(Por Daniel Satur, la izquierda diario) El 28 de septiembre de 1990 una patota de la Policía provincial secuestró al trabajador de 32 años. Lo torturó, mató, descuartizó, incineró y desapareció. Como lo relata en un video, su compañera Mirna Gómez no paró hasta encontrar la verdad. Hubo algunas condenas y habrá otro juicio a fines de 2026. Varios de los criminales murieron impunes y uno, sobrino de Duhalde, sigue prófugo al amparo del Estado. Se prepara un gran acto homenaje a Núñez en su barrio.
Se cumplen 34 años de uno de los crímenes más brutales protagonizados por la Policía Bonaerense luego de su participación activa en el genocidio perpetrado por la dictadura cívico-militar-eclesiástica. Se trata del secuestro, asesinato y desaparición del trabajador de 32 años Andrés Núñez, perpetrado en la madrugada del 28 de septiembre de 1990 por una patota de la ex Brigada de Investigaciones (hoy DDI) de La Plata, capital de la provincia.
La historia de Núñez, su desaparición y muerte y la lucha incansable por verdad y justicia de su compañera Mirna Gómez están relatadas al detalle en uno de los capítulos del libro Desaparecer en democracia de Adriana Meyer (Marea Editorial, 2019) que La Izquierda Diario comparte acá con sus lectoras y lectores. Y lejos de ser un caso del “pasado”, se trata de un crimen a manos del Estado que sigue vigente porque aún hay impunidad.
Este diario ha venido relatando en los últimos años cómo el propio Estado provincial, a través de sus poderes Ejecutivo y Judicial, hizo poco y nada por darle fin a esa impunidad. Pese a que se logró condenar a algunos de los culpables, el año pasado hubo un intento de liberar al expolicía Jorge Alfredo González, condenado en 2010 tras estar casi veinte años prófugo. La lucha de Mirna, acompañada por organizaciones y militantes solidarios, frenó esa medida. Sin embargo en mayo de este año la jueza de ejecución Laura Lazaga volvió a autorizar “salidas transitorias” al asesino.
En abril de 2017 se hizo otro juicio, donde el único imputado era el excomisario Luis Raúl Ponce, quien había estado 22 años prófugo y fue hallado de casualidad en la Patagonia en 2012. En el debate quedó probada su responsabilidad y coautoría en el planeamiento y ejecución del secuestro de Núñez y de las torturas mortales para forzar una declaración de un supuesto robo. También del resto de las etapas del crimen, que incluyen el ocultamiento del cuerpo y la falsificación del libro de la Brigada de Investigaciones. Lo sentenciaron a reclusión perpetua.
Por su parte, recién en mayo de este año la Sala II de la Cámara de Apelación y Garantía en lo Penal de La Plata le puso fecha al nuevo juicio que se hará contra los expolicías César Carrizo y Carlos Veiga, acusados de “omisión de impedir tormentos” y “falsificación de documento público” el primero y de “allanamiento ilegal” y “privación ilegal de la libertad calificada reiterada” el segundo. El debate tendrá lugar a finales de noviembre de 2026, casi cuatro décadas después de los hechos.
Junto a Carrizo y Veiga también debían ser juzgados sus excompañeros Ernesto Zavala, Oscar Silva y Pedro Costilla, pero murieron impunes. La familia de Núñez espera que al menos los dos aún vivos lleguen en esas condiciones al juicio.
Mirna Gómez: “Llevo 34 años luchando por Andrés y por todos los pibes que mata el Estado”
Y otro que debe ser juzgado es Pablo Martín Gerez Duhalde, quien comandó el operativo la noche del 27 de septiembre de 1990 y “consiguió” el campo de General Belgrano (a poco más de 100 kilómetros de La Plata) donde se enterraron los restos de Núñez (hallados cinco años después tras la confesión de uno de los policías).
Gerez Duhalde lleva 33 años en la clandestinidad. Es hijo de Nelly Duhalde de Gerez, prima hermana del exgobernador, exjefe de la “maldita Policía” y expresidente Eduardo Duhalde. La noche en que secuestró, mató e hizo desaparecer a Núñez era su cumpleaños número 29. Este viernes cumplió 63. Está vivo y probablemente lleve una existencia tranquila, con otro nombre, en algún lugar de Argentina. Tal vez haya formado una familia, tenga hijos y hasta nietos. Lo que es seguro es que se comunica con regularidad con su familia y su abogada.
¿El “tío” Eduardo no sabe dónde está Gerez? ¿Tampoco lo sabe Julio Alak, el intendente de La Plata y exministro de Cristina Kirchner y Axel Kicillof que supo ser aliado de hierro de Duhalde durante sus anteriores períodos como jefe comunal? ¿Por qué el peronismo que gobernó 30 de los últimos 34 años no hizo nunca nada para encontrar a Gerez Duhalde?
En el video que acompaña esta nota Mirna Gómez recuerda a su compañero y también la lucha que sigue en pie por verdad y justicia. El registro audiovisual pertenece al grupo de amigos y familiares de Andrés Núñez, que el próximo domingo 6 de octubre realizará una jornada de homenaje al trabajador y de denuncia a los verdugos y sus cómplices. Será en la esquina de 118 y 78 del barrio de Villa Elvira, allí donde ambos vivían en 1990.