“Yo me puse en el lugar de esa familia, en su dolor: pensé ¡pobre hija!, ¡pobre marido! Pero la Justicia tiene que entender que mi hijo, Jorge Moreira y Ariel Covatta, no son culpables de ese horrible asesinato, fue el policía Vadalá. ¿Y qué hacen los jueces y la fiscal? ¿Por qué nos hacen esto? ¿Adónde vamos a pedir ayuda?”, finalizó Moreira.
Como se recordará, las pericias balísticas hallaron la presencia de dos cápsulas de bala: ambas estaban en el coche del ex teniente Vadalá, cuya protección e impunidad sostienen las rejas de dos jóvenes pobres. La decisión sigue en manos del Tribunal en lo Criminal Nº 1 de Mercedes que integran los jueces Carlos Antonio Gallaso, Roberto Guillermo Boccacci y Héctor Ricardo Ameigeiras.