Los últimos informes médicos hablaban de una enfermedad del colágeno, que asociada a la tuberculosis hacía que la salud del menor involucionara hasta un fallo multiorgánico y un derrame pericárdico que obligó a que se le realizara una punción para extraerle agua que se comprometía el corazón y los pulmones.
Néstor era el mayor de cinco hermanos. Su familia vivía en el paraje Paso Sosa, ubicado a 12 kilómetros de Villa Río Bermejito. En ese lugar funciona un puesto sanitario. Después fueron a vivir al casco urbano de Bermejito para que el niño fuera atendido en el hospital de esa localidad porque ya había contraído tuberculosis.
Su caso fue noticia pública hace pocos meses porque estaba gravemente enfermo de tuberculosis y de desnutrición asociada a dicha enfermedad, que azota a las comunidades indígenas de El Impenetrable. Estuvo internado en el hospital de Bermejito y luego, por la gravedad del cuadro que cursaba, fue derivado al hospital de Juan José Castelli, de donde fue dado de alta para continuar el tratamiento en su casa.
Más tarde, producto del cuadro socio-sanitario y ambiental adverso, Néstor volvió a ser internado hasta que el día 19 de diciembre lo derivaron al Hospital Pediátrico, donde finalmente falleció.
Víctima de la injusticia social
Rolando Núñez, coordinador del Centro de Estudios Nelson Mandela, había lanzado un llamado a las autoridades para que se ocuparan urgentemente del tema, cuestionando la falta de responsabilidad oficial. “Los médicos de guardia de la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Pediátrico de Resistencia informaron al papá que había muerto el niño qom Néstor Femenía. En el acta de defunción se registró el fallecimiento a las 13 horas y que el deceso se produjo por ENFERMEDAD. O sea que, además del calvario que atravesó este niño, su fallecimiento formará parte de las cifras negras de la salud porque su muerte no será registrada como derivación de la tuberculosis y de la severa desnutrición que cursara en vida”, dijo el abogado al confirmar la noticia.
Para Núñez, “la muerte Néstor sintetiza y patentiza, con exactitud y objetividad, la profunda injusticia social instalada en la comunidad chaqueña”, y recalcó: “Repetimos que este fallecimiento nos interpela a todos y pone al descubierto como se gobierna en Chaco y en Argentina. Este fallecimiento responsabiliza a los dos gobiernos dado que el programa de lucha contra la tuberculosis es vertical, o sea que compromete al gobierno nacional y a cada gobierno provincial, en distintos tramos o eslabones. Es lo mismo que ocurre con el programa del Chagas”.