(Por Roxana Yattah / Psicoanalista)Por la presente solicitamos que la Sra. ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cese con este espectáculo de REPRESIÓN a los adultos mayores todos los miércoles alrededor del Congreso de la Nación, que nos avergüenza como argentinos.
Ver cómo se pega a un viejo o vieja, cuyos huesos frágiles si se caen o reciben un golpe, son factibles de sufrir una fractura; hace que esos golpes y esa violencia rebote contra nuestras propias conciencias ciudadanas, volviéndolos insoportables.
Advertimos que estas medidas sostenidas con la misma saña y brutalidad por tiempo indeterminado, sin voluntad de dialogo, pueden resultar fatales para la salud física y psíquica de la población, con efectos totalmente patológicos, al vivenciar cómo se cruzan a la vez varios límites éticos. Dañando en forma irreversible la construcción de la civilidad que ha costado toda la vida de la República construir; precisamente con el Congreso de la Nación como fondo, bastión y epicentro de la CONVIVENCIA DEMOCRATICA.
Por lo demás ¡es tan evidente que detrás de este despliegue absurdo y ofensivo a nuestra dignidad, hay jugosos negocios referidos a la compra de armas y municiones! Intereses individuales a los que una sola persona o grupo no están dispuestos a renunciar y que terminan perjudicando a la comunidad en su conjunto.
Por estos motivos, hacemos un llamado a la misma ministra Bullrich y a las fuerzas que intervienen en este conflicto para que cesen de inmediato con sus acciones y la población pueda por fin volver a respirar un clima de racionalidad y cordura.
Esperando puedan reflexionar y debatir en el interior de cada colectivo, con sus propias familias y en la soledad de sus conciencias estas inquietudes y agradeciendo que así sea,
Un cordial saludo * Buenos Aires, lunes 19 de mayo de 2025
*Texto de una profesional del campo “psi”, para sumar a una iniciativa colectiva, (preferentemente antes del miércoles 21 de mayo próximo)
** Parodiando el famoso artículo de Freud “Pegan a un niño” donde analiza los efectos traumáticos varios de la acción perversa de «pegar a»