El Derecho a saber la Verdad en relación a las desapariciones forzadas, se refiere al derecho a conocer los progresos y resultados de una investigación, la suerte y el paradero de las personas desaparecidas y las circunstancias de su desaparición, así como la identidad del autor o los autores de la desaparición. El derecho a la información sobre la persona desaparecida junto con el derecho inderogable del hábeas corpus, deben ser considerados fundamentales para evitar que se produzcan desapariciones forzadas. Todo esto nos fue negado, incluso nos rechazaron en tres instancias la presentación de Hábeas Corpus, con un poder judicial que estuvo a la altura de los verdugos, partícipe necesario y engranaje fundamental de la desaparición forzada en democracia de Luciano Arruga, que a poco de cumplirse 10 años en enero del 2019, difícilmente podamos creer que haya Justicia. Cuando el Estado restringe el Derecho a la Verdad, que es un derecho legítimo que tienen lxs familiares víctimas de desapariciones forzadas y la sociedad en su conjunto, no sólo la impunidad se perpetúa en el tiempo, sino también los mecanismos para desaparecer una persona en democracia siguen intactos.
“Causalidad del destino” este 17 de octubre también se cumple un año de que el Estado restituyera el cuerpo de Santiago Maldonado a su familia, luego de haber estado desaparecido durante 77 días. También su familia lo encontró con la lucha, desde aquel 1 de Agosto del 2017 en el que Santiago fue secuestrado y asesinado por Gendarmería y desaparecido por el Estado. El mecanismo para desaparecer una persona en democracia es tan perverso, que pese a que cambian los gobiernos, la práctica y discursos de sus engranajes es la misma en todas las causas de desapariciones forzadas en democracia: amenazas, hostigamientos y persecuciones a las familias, amigxs y testigos, pinchaduras de teléfonos a lxs familiares de las víctimas por parte del poder judicial, medios hegemónicos que culpabilizan e inventan versiones fieles a los gobiernos de turno y un poder político que pone en práctica la política del desgaste, mientras cínicamente prepara la “versión oficial de los hechos” la cual no tiene responsables, más que la propia víctima: Luciano cruzó la Gral. Paz por la vía rápida, Santiago se ahogó en el río.
Este 17 de Octubre día de Lealtad a la Impunidad, seguimos exigiendo el Derecho a la Verdad de saber qué pasó con Luciano, de la misma forma que seguimos denunciando que TODOS LOS GOBIERNOS CONSTITUCIONALES TORTURAN, ASESINAN Y DESAPARECEN EN DEMOCRACIA.
Familiares y Amigxs de Luciano Arruga.