(Por Kuña Mbarete/APL) Nos gustaría poder decir que la UFI nº2, que actualmente lleva el caso por el homicidio de Joselin’ está avanzando. Sin embargo esto no es así. Lo qué está haciendo es criminalizar a Zaida Mamani , su madre, quien es la única qué está siendo investigada. En este camino de (in)justicia Zaida es acompañada por varias personas, espacios, movimientos y referentes de la lucha constante contra las injusticias; lxs cuales ven como tanto para la UFI especializada en Violencia de Género nº 17 y la UFI nº 2 fue más sencillo criminalizar a una mujer pobre, indígena, migrante; que ponerse a investigar.
En las últimas semanas se ha convocado a pericias psicológicas en reiteradas oportunidades a Zaida Mamani. Muchas de estas fueron canceladas sin siquiera avisar, haciendo qué ella se enterara de los cambios cuando se encontraba en los Tribunales de Lomas de Zamora. Otras tantas veces le dicen que su cita era otro día, por lo qué Zaida ya tomó la precaución de pedirle se lo anoten en un papel. Esto evidenció cómo el pasado 18 de agosto tras informar que se encontraba demorada por problemas en los trenes (Zaida quien está cursando el tercer trimestre de embarazo debe tomar un tren y varios colectivos para llegar a Tribunales de Lomas de Zamora desde Longchamps), la secretaria de la Licenciada Mariana Cernichiaro del área pericial de la defensoría general le dice que su cita había sido el día anterior. Es decir, si Zaida no hubiese tenido ese papel que decía «18 de agosto» la voz de la secretaria hubiese pesado más, haciendo qué eso quedará registrado en la causa y perjudicándola. Hubiese sido totalmente funcional para sostener la postura de, entre otros, el fiscal que señaló que luego de estas pericias se elevaría a juicio el caso y, también, dejó entrever que cree en que ella es culpable.
El estado de alerta es constante! Hasta un mínimo detalle puede llevar a que Zaida Mamani termine presa. ¿Porque mínimos detalles? Porque la fiscalía no investigó. Las muestras de sangre tomadas al padrastro de Joselín, a la misma Zaida y a Rubén Correa no fueron analizadas. Por otro lado, no fueron llamados a declarar, mientras Zaida ya lo ha hecho varias veces habiendo sido imputada hace menos de un año. Mientras que los 5 sospechosos de la causa no han repetido declaraciones en estos 3 años y 8 meses.
Las irregularidades a los que una mujer embarazada de seis meses se enfrenta día a día en la búsqueda de justicia de su hija, sumado a la criminalización que está viviendo, y que el fiscal ya dejó en evidencia su postura, llevan a que la vulnerabilidad de derechos de ella sea total. El abogado público que tenía Zaida resultó no estar a la altura para acompañar lo que parece más una causa armada para cerrar rápido el caso y que no se note que no han hecho nada en estos casi 4 años. Por lo tanto, Zaida Mamani debió contratar un abogado particular; el Dr. Ernesto Flores.
La nueva defensa tiene experiencia en casos donde la “justicia” condena por ser mujer, migrante y pobre. Él fue abogado de Morelia, una mujer boliviana que sufría violencia de género y tras defenderse del ataque de su ex pareja fue condenada por homicidio agravado por el vínculo y pasó varios años detenida; pudiendo finalmente conseguir su libertad con la defensa de Flores.
En este sentido, Zaida se ha hecho de una “herramienta” con la experiencia suficiente para que, junto al grupo que hoy en día la acompaña, poder enfrentar este atropello del sistema judicial racista y patriarcal. A su vez, las fotos qué acompañan esta nota son también prueba de que en este andar por justicia las solidaridades y apoyos se multiplican en otras causas que entienden de la violencia del Estado. Entre ellas la causa del Taller Textil de la calle Luis Viale, con una de sus sobrevivientes, Lourdes Hidalgo, quien se acercó a Tribunales de Lomas de Zamora para brindar su apoyo. Ese mismo día los familiares de Luis Cardozo, quienes también se encontraban denunciando una causa armada en Lomas, no dudaron en brindar su apoyo a Zaida, poniendo en evidencia como cuando sos pobre la Justicia no investiga, sino que condena. Esa condena se hace más evidente siendo mujer, boliviana e indígena. Luego, en la Ronda de los Jueves ,Zaida pudo contar su historia recibiendo el apoyo de Nora Cortiñas (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), como también el de Ivana Huenelaf, mujer mapuche-tehuelche, quien no dudó en brindar su apoyo ante el atropello de un sistema judicial que cuando sos una mujer indígena criminaliza.
Por todo esto, dejamos el contacto para entrevistas, difusión o apoyo.
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