EL NEGRITO AVELLANEDA IN MEMORIAM

Link para entrar a la radio https://www.ungs.edu.ar/fmlauni/radio

Este lunes, a las 19 horas,  en un programa especial de Radio la Uni, se recordara a Floreal «Negrito» Avellaneda, al cumplirse un nuevo aniversario del secuestro que sufrió junto a su madre, el 15 de abril de 1976, por la dictadura empresarial-Militar- Eclesiástica. Iris Avellaneda, titular  de la Liga Argentina por los Derechos Humanos estará en vivo en el programa Construyendo Memoria,  de la Asociación de  Sobrevivientes, Familiares y Compañeros de Campo de Mayo.

Cómo se recordara Floreal «el Negrito» Avellaneda era estudiante secundario y militante de la Federación Juvenil Comunista cuando hace 48 años fue secuestrado por un grupo de tareas del Ejército y la policía bonaerense y trasladado luego a Campo de Mayo, donde se lo vio por última vez antes de convertirse, a los 14 años, en una de las víctimas más jóvenes de los «vuelos de la muerte».

“El negrito era un pibe vivo, especial y se notaba que era desde chico un luchador. Haberlo perdido fue un dolor muy grande. Estuvimos junto con mi marido juntos en cautiverio. Nosotros fuimos blanqueados, pero él no volvió”, recordó Iris Pereyra de Avellaneda.

Esa madrugada, un grupo de tareas llegó a la casa en la que vivían en la localidad de Munro, con la intención de capturar al padre de Floreal, que era delegado sindical en la fábrica metalúrgica de Tensa, pero el gremialista logró escapar por los techos y los integrantes del grupo de tareas se llevaron al ‘Negrito’ y a Iris a la comisaría de Villa Martelli.

A principios de mayo, Iris quedó blanqueada; dejó Campo de Mayo y pasó a la cárcel de Olmos, en cercanías de La Plata, y luego a la unidad penitenciaria de Devoto, hasta que en 13 de julio de 1978 recuperó la libertad.

Tras un largo peregrinar, los padres de Floreal lograron que, en agosto de 2009, el Tribunal Oral Federal 1 de San Martín condene, entre otros, al general Omar Riveros como el principal responsable del asesinato de este joven miembro de la  «Fede».